Políticas

14/9/1988|241

El gobierno vuelve a golpear contra los combatientes chilenos

El miércoles 7 de septiembre, las esposas de los compañeros chilenos detenidos en la Argentina iniciaron una huelga de hambre frente al Congreso Nacional, en demanda de la inmediata libertad de los miembros de la resistencia chilena.

La medida contó con el apoyo del Comité de Solidaridad formado en Buenos Aires, en el que confluyeron militantes de derechos humanos, compañeros chilenos, el PL, el PO, el Mae y al que se sumaron ahora el PC y el PTS.

Pocas horas después de ¡nidada la huelga de hambre, dos carros de asalto, varios fords falcons, y policías de todo tipo de tamaño, se llevaron detenidos a dos de los militantes que la apoyaban, al tiempo que desmantelaban la huelga.

Inmediatamente se denunció el atropello policial a los medios, y se inició la campaña por la inmediata libertad de los detenidos, los que fueron duramente golpeados por el operativo comando de la federal. La férrea denuncia y movilización de todos los compañeros chilenos y de los militantes del PL y del PO, logró la inmediata libertad de los detenidos.

La primera resolución que se tomó, apoyando el planteo de las propias compañeras huelguistas, fue la prosecución de la huelga de hambre, que se trasladó a la sede de Familiares.

Como seguir la lucha

Es evidente que la huelga de hambre, aún con todas las limitaciones del apuro con el que se la montó y el propio carácter de la medida resultó un dardo envenenado para el gobierno, que no pudo resistir su permanencia ni 24 horas. La firme y corajuda decisión de las compañeras huelguistas mostró la voluntad de romper el bloqueo que la izquierda democratizante y sus laderos habituales trataron de imponerte a la lucha.

Ahora, mientras se discute cómo y dónde seguir con la huelga de hambre, el problema central de la Comisión de Solidaridad, es la realización de una gran actividad da maesa previa al plebiscito, que es indudablemente un punto de atención para el activismo y la ciudadanía democrática, tanto de Chile como de Argentina. El PC y el Mas se oponen a la realización de esa actividad que fuera propuesta por el PO, el PL y el PTS.

El Partido Obrero considera fundamental la puesta en pie de un gran acto masivo para fin de mes, a pocos días del plebiscito, en el que se imponga la consigna de la libertad a los luchadores encarcelados por la burguesía argentina y contra el contubernio de la burguesía “opositora* chilena, que trabaja para salvar al régimen del pinochetismo.