Políticas

27/3/2017

El Grupo Desa, un monopolio hecho a base de tarifazos y subsidios


El grupo Desa, la mayor distribuidora de energía eléctrica de la provincia de Buenos Aires, compró a principios de marzo, por u$s250 millones, las empresas distribuidoras de electricidad Edelap, de La Plata y Edea, de Mar del Plata, que provee a centenares de miles de usuarios de la provincia de Buenos Aires.


 


Desa también opera dos de las áreas concesionadas en el territorio bonaerense: Eden y Edes, que abastecen, en conjunto, a unos 520 mil clientes. Además, desde el año 2012, es la accionista mayoritaria de Edesa, la distribuidora de energía eléctrica de la provincia de Salta, que abastece a más de 300 mil usuarios. 


 


La formación de este monopolio energético tuvo su origen en los enormes subsidios que le fueron otorgados por el gobierno kirchnerista y, además, en las facturas impagas a CAMMESA, la distribuidora mayorista estatal que la provee y que se fueron acumulando desde 2014 hasta hoy, por más de 15.000 millones de pesos.


 


Edea que, ya durante el actual gobierno de Macri, aplicó dos tarifazos del 300% cada uno en los últimos meses, provocó en Mar del Plata una crisis eléctrica por desinversión que afectó a los usuarios y a las condiciones laborales de sus trabajadores.


 


Entre ellas está la negativa a incorporar a trabajadores a planta permanente, el mantenimiento de empresas tercerizadas que realizan trabajos correspondientes a los trabajadores estables, la falta de mantenimiento de vehículos de la empresa y la modificación en las condiciones de ingreso de personal exigiendo requisitos no contemplados en el convenio del sindicato Luz y Fuerza.


 


A esto se le suman los incumplimientos del “Programa de Participación Accionaria para sus Trabajadores”, ya que la empresa se niega a incluir a un representante de los trabajadores en el directorio y también el incumplimiento en el pago de las acciones a los jubilados.


 


Ante esta situación el sindicato de Luz y Fuerza realizó la semana pasada un paro de 24 horas y se dispusieron cuadrillas bloqueando los portones de las empresas para evitar el vaciamiento de las maquinarias y elementos de trabajo y exigir la inversión necesaria en el mantenimiento del servicio para terminar con los cortes de luz y baja tensión.


 


Rogelio Pagano, presidente y socio mayoritario de Desa, fue antes director suplente de Pampa Energía y director Financiero de Edenor, perteneciente al holding de los kirchneristas hermanos Mindlin.


 


Sobre el tema de la desinversión y el servicio deficiente, la bancada del PO-FIT realizó el año pasado un pedido de informe en la Legislatura de la provincia.


 


Llamamos al conjunto de los trabajadores, asambleas vecinales, multisectoriales contra el tarifazo a apoyar enérgicamente estas medidas.


 


A la coalición del ajuste, le tenemos que oponer un programa de los trabajadores: nacionalización del comercio energético (mayorista y minorista) bajo control de los trabajadores, anulación del tarifazo y reorientación de los recursos energéticos en función de un plan de industrialización del país al servicio de los intereses de los trabajadores.