Políticas

26/6/1997|545

El II Encuentro por el Frente

Más de 80 compañeros concurrieron al segundo Encuentro por el Frente. Participaron compañeros jubilados, estatales, docentes, obreros del pescado, estudiantes, vecinalistas, el PC y el PO. Se hicieron presentes delegaciones (seis miembros) de la Comisión Directiva del Sindicato de Luz y Fuerza de Mar del Plata y varios dirigentes de ATE, entre ellos Daniel Barragán, secretario general de ATE y de la CTA del Sudeste.


El expositor de Luz y Fuerza informó pormenorizadamente sobre los alcances de la privatización de Eseba. Daniel Cuenca explicó que las concesionarias recuperarán su inversión en apenas 18 meses, a través del descuento a los jubilados, del aumento de las tarifas domiciliarias y de la conexión de medidores, y la reducción del 40% del personal. El viernes 27 se realiza una asamblea de los primeros 300 cesanteados por la empresa. El Encuentro llamó a formar comisiones de resistencia a los tarifazos en los barrios y acompañar las medidas que resuelvan los trabajadores lucifuercistas.


Barragán (ATE) resaltó que el eje de los ‘opositores’ es la corrupción, pero ésta es sólo una consecuencia de la política de entrega nacional, flexibilización laboral y desocupación. La tarea fundamental —continuó— es la organización de los desocupados y de los ocupados en defensa de sus puestos de trabajo y de sus reclamos. La experiencia del Santiagueñazo indica la importancia de canalizar políticamente a los luchadores porque, si esto no se hace, se refuerzan los partidos del sistema. "Vengo a saludar este nuevo espacio —concluyó— y a certificar que acá se encuentran verdaderos luchadores".


Los docentes llamaron a participar de las "radios abiertas" y las jornadas preparatorias de la marcha del 20. Los obreros del pescado anunciaron la realización de una Asamblea callejera contra los convenios negreros por empresa y los "convenios basura", bajo la consigna "destapemos la olla". Los integrantes de la Lista Violeta de ATE dieron a conocer un pronunciamiento político reivindicativo que están firmando masivamente.


Al término del Encuentro se formaron varias comisiones: una sindical, para impulsar la realización de plenarios abiertos de delegados y activistas en los gremios; una de desocupados, para abrir una organización en los barrios; una estudiantil y una comisión redactora de un programa de reivindicaciones. Por último, se resolvió la convocatoria de una asamblea para mediados de julio, extendida a toda la V sección electoral (que abarca, además de Gral. Pueyrredón, a Necochea, Tandil, Alvarado y Balcarce).


El Encuentro no trató la necesidad de intervenir en el proceso electoral con candidatos de los trabajadores electos por la base, una aspiración planteada en el comunicado de la "Comisión Provisoria por el Frente" (que integran varios dirigentes del Encuentro, entre ellos el PC y el PO). El acuerdo en el segundo Encuentro fue elaborar un programa reivindicativo para un "frente de lucha" y extender la convocatoria a los municipios de la V sección electoral. El PO expuso el llamamiento a la Asamblea Nacional y quedó sin resolver el envío de una delegación del Encuentro. En conversaciones con la dirección del PC zonal, ésta nos manifestó que su límite en materia político-electoral no va mas allá de explorar la posibilidad de un frente comunal.


El desafío es sumar a los integrantes del Encuentro a la formación de un frente de la izquierda y los trabajadores en lucha a nivel nacional y provincial. A través de una lucha clara y consecuente por un frente nacional, los activistas y luchadores marplatenses no sólo le darán una perspectiva política general a su "Encuentro"; lograrán, también, separar la paja del trigo. O en otras palabras, separar a quienes efectivamente están por un frente de la izquierda y de los trabajadores en lucha —en Mar del Plata y en todo el país— de quienes quieren poner obstáculos en este camino. Como advierte una declaración del PO zonal, llamando a participar de la Asamblea Nacional: "no hay que confundir el interés genuino de los luchadores por poner en pie alternativas frentistas en cada lugar de trabajo, vivienda o municipio con los planteamientos políticos de los partidos que, aceptando frentes parciales, evaden su responsabilidad por no impulsar un frente en todo el país, a escala nacional".