A raíz de las declaraciones de los legisladores, la delegada en Salta del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), Verónica Spaventa, anticipó que enviará a la Legislatura provincial una nota para recordarle cuál es el marco normativo vigente.

La funcionaria recordó que la lucha contra el trabajo infantil es un mandato constitucional y un deber del Estado, para garantizar el derecho de los niños a educarse y recrearse. Para Spaventa, “estos discursos que naturalizan el trabajo infantil son discriminatorios porque fijan un destino para ciertos grupos de la niñez”, y llamó la atención de que quienes defiendan esa posición sean “representantes de todo el pueblo”. Además de reconocer que el trabajo infantil es “una realidad que hay que trabajar para erradicarla”, evaluó que hay una resistencia de ciertos sectores a que esto ocurra, porque “se están tocando intereses económicos”.

El Colegio de Psicólogos exhortó a seguir con la lucha contra el trabajo infantil

El 7 de octubre, el Colegio de Psicólogos de la Provincia de Salta emitió un comunicado en el que exhorta a los ciudadanos e instituciones “a cuidar y defender el derecho de nuestros niños contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o nocivo para su salud, su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social”.

La institución que nuclea a los psicólogos salteños explicó la necesidad de sentar su posición “ante las expresiones de público conocimiento que se suman a favor del trabajo infantil como una solución aberrante para ‘alejar a los niños y adolescentes del flagelo de las drogas’”.

En la nota, la presidenta del colegio, Irma Silva, señala que “a pocos meses de cumplir la primera década del siglo XXI nadie puede negar que el trabajo infantil conlleva separación en la familia, abusos de distinta naturaleza, con largas horas de trabajo, cargas pesadas y otras formas que anulan los derechos de los niños a la educación, la salud y al esparcimiento”.

Finalmente, invita a “reflexionar sobre estas cuestiones en la sociedad misma y sin ocultamientos, porque se trata de situaciones que son derivadas de una evidente vulneración de los derechos de nuestros niños, que incluso se ven forzados a arriesgar su salud y sus vidas, hipotecando su futuro como adultos productivos”.

Trabajo en negro

Pero el Colegio de Psicólogos no fue el único que mostró su malestar ante las intervenciones de algunos diputados tabacaleros que consideraron que el trabajo infantil contribuía a la formación de los niños, que formaba parte de la cultura de las áreas rurales, que permitía que muchos ayudaran a sus padres, y que mantenía a los chicos alejados de las drogas. Consultado por Nuevo Diario, el delegado en Salta de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, Martín Avila, consideró que expresarse en favor del trabajo infantil equivalía a propiciar el empleo en negro, ya que el trabajo realizado por un menor de edad no puede ser blanqueado.

A su vez, el funcionario diferenció el trabajo que realizan los niños en el ámbito familiar de aquel que es realizado para un tercero. En ese sentido, explicó que aunque algunos niños acompañen a sus padres en las actividades que realizan en el campo, no se trata de un empleo familiar, ya que trabajan en favor del dueño de la finca.