Patricio Echegaray, secretario general del PC, viajó personalmente a sellar el acuerdo para incorporarse a una lista colectora por la reelección del actual gobernador, el radical K Zamora (Compromiso Social). Fue recibido en la Casa de Gobierno santiagueña por el jefe de gabinete, Elías Suarez, quién agradeció al PC el gesto (Propuesta, 16/10). El PC argumenta que hay que luchar “contra la derecha” y el juarismo, pero en realidad se trata del argumento de un moribundo que no puede ir a elecciones en nombre propio.

Propuesta (23/10) señala que: “Compromiso Social es una herramienta para profundizar los cambios que ha dado este gobierno alineado en la política nacional, por eso valoramos mucho que Zamora haya trabajado a favor de la derogación de la Resolución 125”. ¿Un lapsus? El gobierno de Zamora se ha destacado por su apoyo resuelto a la ‘patria sojera’, que en la provincia tiene un record de desmonte de bosques, expulsión de campesinos, etc. El senador Rachid, del Frente Cívico en el poder, votó por la derogación de la 125. Zamora nunca tomó medida alguna contra Rachid.

Este frente Compromiso Social surgió inmediatamente después del triunfo del lock out agrario. El diario El Liberal (10/8) reseña un plenario que se hizo con la presencia de dirigentes nacionales del kirchnerismo donde “se ratificó el alineamiento con las gestiones del gobernador Zamora y de la presidenta, Cristina Kirchner”.

¿Contra qué “derecha” se enfrenta entonces el sojero Zamora? Según el PC, en Santiago “el avance de la derecha es muy fuerte”.

El juarismo ya ha sido desplazado hace años. La ‘oposición’ derechista está diluida. La política del gobierno zamorista en materia agraria ha sido ferozmente anticampesina. En otra nota del mismo semanario (Propuesta, 23/10) un tecnócrata del Programa Social Agropecuario -denunciado oportunamente por el Mocase-Vía Campesina como oficialista- señala que “el actual gobierno ha iniciado un acercamiento, se ha abierto una mesa de diálogo, un registro de poseedores” de tierra. Pero las organizaciones campesinas como el Mocase han denunciado la ‘mesa de diálogo’ como una impostura y se han retirado de ella. El funcionario entrevistado por el PC afirma que “las organizaciones campesinas acusan al actual gobernador, el radical Gerardo Zamora, de aceptar la criminalización de sus militantes”. ¿Cómo que los campesinos “acusan”? ¿No son una realidad los allanamientos, las persecuciones, las torturas y las detenciones de decenas y decenas de campesinos militantes defensores de sus tierras y derechos? La policía y los jueces son cómplices de los grupos parapoliciales, las ‘guardias blancas’ de la patria sojera, que se quiere quedar con las tierras de las comunidades indígenas y campesinas.

¿Por qué el “Compromiso Social” no estuvo en las carpas y el corte de calles que se instaló frente a la gobernación la semana pasada, para reclamar la libertad de dirigentes campesinos arbitrariamente detenidos?

Las leyes que bloquean el desmonte de bosques, frenan algunos desalojos, etc., no se cumplen en Santiago del Estero. El PC reconoce: “El lobby de los poderosos, como siempre es más fuerte”. Entonces ¿cuál es la progresividad del gobierno de Zamora? El PC es un lobista más; es decir, una camarilla más en el frente sojero-kirchnerista que reprime a los campesinos, los expulsa de las tierras, ataca la educación y la salud pública, convive con el juarismo, etc.