El rol del Polo Obrero en todo el proceso que culminó en la Marcha de la Bronca es reconocido por todos los sectores, incluso por aquellos que son enemigos jurados de nuestra organización. En la Marcha, fuimos la única organización que tuvo presencia en todas las columnas. La principal, la de Amaicha del Valle, con Martín Correa a la cabeza, y una delegación encabezada por Maxi, junto con trabajadores de Vialidad, arrancó con un acto de más de 150 personas, para recorrer luego los valles y confluir en Famaillá con la columna Sur. En la columna del Este estuvo Pepe Kovak. En la columna Norte, desde Tafí Viejo, participaron Sergio Díaz y también desde otras vertientes, como la que vino de Villa Carmela, a cargo de Julio. En la Plaza el Polo fue la columna más numerosa. Se mantuvo cohesionado, no se bajaron las banderas, ni nos retiramos durante los incidentes. Fuimos los últimos en retirarnos de la Plaza, y en los lugares donde no nos dejaron pasar, hubo una inmediata reacción de lucha. En los choques y forcejeos con la policía, las mujeres tuvieron un rol de primera línea.

En la Plaza hubo un cartel gigantesco del Partido Obrero, el único partido que apareció fisonomizado. Durante toda la marcha se vendieron más de 300 periódicos. Como frutilla del postre, el único dirigente nacional que se hizo presente fue Néstor Pitrola. Muchos otros dirigentes, como De Gennaro, Moyano, etc., que habían anunciado su presencia, no asistieron.