Políticas

11/6/1998|588

El Ptp también vota a privatizadores en La Plata

En Ingeniería de La Plata días atrás fue re-electo el decano Albina, un viejo funcionario del gobierno militar. Albina es el candidato de la derecha profesoral de la facultad, que domina los Institutos donde se implementa la política menemista de convenios con terceros y de privatización de la Universidad. Albina fue reelecto con los votos del Ptp (3 consejeros estudiantiles de la Lista Unidad), como hace tres años. Bajo su gestión proliferaron los posgrados arancelados. Los docentes del curso de ingreso tuvieron que movilizarse intensamente para no sufrir una reducción salarial de un 30% promedio. Bajo su gestión el FOMEC se abrió paso. La lista de profesores que lo apoyó, y el propio Albina, son partidarios del rector Lima (Albina dirige la comisión más importante del Consejo Superior, la de pautas presupuestarias). Durante la huelga no docente, Albina se dedicó a ‘apretar’ a los no docentes ‘sugiriéndoles’ que se les descontarían los días de huelga. Ahora que pasó el chubasco, presiona a los docentes para que recuperen las horas de paro, amparado en una resolución del Consejo Académico (el Ptp, que integra ese cuerpo, aún no se delimitó de esa medida antihuelga).


Como se ve, el de Albina es un decanato que no tiene nada que envidiarle a los más rabiosamente menemistas y privatizadores.


El Ptp repitió la maniobra que denunciamos desde estas páginas tres años atrás: encubrió su voto por los privatistas convocando una Asamblea estudiantil para votar un programa, el que luego se le propondría suscribir a cada uno de los candidatos. ¡La lista que firmara más puntos de este Programa sería ‘beneficiada’ con los votos del Ptp! Demás está decir que esto es el monumento al ‘blanqueo’, porque ninguna de las listas es partidaria de la más elemental reivindicación estudiantil, o de la defensa de la Universidad estatal, gratuita y del ingreso irrestricto.


Los activistas de la Lista Unidad que realmente quieren luchar contra la privatización, contra la expulsión de estudiantes, por el descongelamiento de las plantas docentes y no docentes, tienen que sacar rápidamente las conclusiones de esta política, que confunde y desorganiza al movimiento estudiantil. El recrudecimiento de las contradicciones y los choques exige un movimiento estudiantil independiente de todas las fracciones que son correa de transmisión de la política menemista en la Universidad.