Políticas

19/6/2013|1273

Elecciones en Tucumán: Irrumpe la crisis de un pulpo capitalista

El segundo grupo azucarero de Tucumán y cuarto del país, la Compañía Azucarera Los Balcanes, entró en cesación de pagos. A fines de mayo, pidió el concurso preventivo de acreedores aduciendo que carecía de fondos para afrontar sus deudas. El grupo, controlado por el empresario Rochia Ferro, detenta el 10% de la producción nacional de azúcar. También posee el ingenio La Florida, donde la mayor planta de bioetanol del país.


Se trata de un pulpo que acumuló empresas de la mano de la ‘gestión' del gobernador Alperovich. El grupo obtuvo, en los últimos años, beneficios extraordinarios. Desde la producción azucarera y alcoholera, se transformó en uno de los principales comercializadores de azúcar e incursionó en otros negocios: "Posee la Compañía de Warrants del Aconquija y tiene inversiones en el sector turístico vía los hoteles Plaza, Luna Huana y La Casona; en producción, distribución y transporte de energía: Northwest, Covemat Logística, Las Palmas; y en el área educativa, el Centro de Altos Estudios y Universidad de San Pablo." (Diariobae, 12/6).


Rochia Ferro justificó la convocatoria de acreedores por el derrumbe de los precios del azúcar y del biodiesel. Rochia Ferro se encuentra procesado por la justicia federal de Santiago del Estero, por daños de contaminación sobre el río Salí.


El quebranto de Balcanes ha provocado un terremoto. Entre sus acreedores, se encuentra la megacadena de supermercados de la provincia, que pertenece a Emilio Luque. La quiebra amenaza con crear un efecto en cadena sobre el comercio en la provincia. Argentina, la segunda exportadora mundial de biodiesel, ha debido aumentar las retenciones al producto para enfrentar las acusaciones de ‘dumping' por parte de la Unión Europea. Por otro lado, por la misma razón se encuentran cuestionados los subsidios estatales a esta industria. El aumento de los precios y de los costos, por un lado, y la crisis de YPF, por el otro, han puesto en capilla otro pilar del negocio: la mezcla de alconafta.


La crisis de la actividad azucarera, por el derrumbe de los precios internacionales y la marcada sobreproducción, ha afectado a otro ingenio, el San Juan (que ya está en concurso de acreedores) y varios más. El gobierno de Alperovich promovió una ley que impone cupos a la comercialización del azúcar en el mercado interno y obliga a depositar los excedentes, los que solamente pueden ser aplicados a la exportación o para producir alcohol. Esta tentativa de aumentar el precio del azúcar no está funcionando. Varios ingenios -entre ellos los del grupo Minetti-y el San Juan- han declarado que no van a respetar las disposiciones de la nueva ley. Otros empresarios afirman que el gobierno no podrá impedir que los ingenios produzcan azúcar en negro.


Con la cesación de pago del Grupo los Balcanes y la crisis azucarera entra en zona de turbulencia una parte sustancial de la base social de Alperovich. Bajo la presión de las patronales, el gobernador se enfrenta a los K para reclamar la devaluación del peso comercial (no alcanzaría el desdoblamiento cambiario o el Cedin). La oposición a Alperovich se embandera con esta variante. En los coletazos de la crisis, se deja ver el parate en la construcción y la obra pública, además de un salto en el desempleo, la precarización laboral y la miseria social.


El ‘feudo' K en el norte de la República se deshilacha en las vísperas de la campaña electoral.