El próximo 1° de octubre se realizarán las elecciones municipales en la ciudad de Villa María (Córdoba). En la ciudad se presentaron 10 listas para disputar la intendencia, el Frente de Izquierda Unidad llevará de candidata a intendente a Nadia Brossard, enfermera integrante del MST, en tanto que José Gutiérrez, docente de nivel medio y universitario de la UTN, se postula para el cargo de primer concejal, y Daniel Barrientos, docente jubilado (vicepresidente de la asociación de básquet de la ciudad), se presenta para en el cargo de tribunal de cuentas, ambos son candidatos por el Partido Obrero.

El Frente de Todos, que viene ocupando el Ejecutivo de la ciudad, inició la campaña presentando tres candidatos para terminar encolumnandose detrás del candidato del PJ provincial, Eduardo Acastello, quien se desempeña como ministro de Industria del gobernador Juan Schiaretti.

Los integrantes del Juntos por el Cambio se dividieron principalmente en dos listas. Una lleva de candidato al diputado provincial a Darío Capitani, candidatura impulsada fundamentalmente por el PRO que hace campaña junto a Patricia Bullrich. La otra propuesta lleva de candidato a Braulio Zanotti, más cerca de la UCR, y se presenta con un eslogan muy semejante al del candidato del partido amarillo.

La división de los partidos de la burguesía se da en un cuadro en el que sectores de los/as trabajadores/as del sector público comienzan a organizarse por la lucha salarial. En la ciudad se desarrolló un reclamo salarial de municipales; los docentes autoconvocados comenzaron a movilizarse y por otro lado el sector de salud no dejó de realizar asambleas desde la lucha que llevaron a cabo los residentes el año pasado.

El reclamo de recomposición salarial se da en un cuadro de precarización laboral, como es el caso de las trabajadoras de las Salas Cuna, un sector que se encuentra totalmente sometido por el oficialismo, cuyas docentes de nivel inicial son obligadas a realizar campaña militante y volanteada casa por casa buscando el voto de Massa. Son algo más de doscientas docentes que se encuentran en condiciones de total precariedad laboral, que trabajan en 13 jardines maternales, percibiendo un salario de miseria que ronda los $100.000. El municipio ni siquiera se hace cargo del monotributo.

El Partido Obrero realizará una agitación para reforzar la lucha por demandas populares centrales, como la defensa del salario, contra la precarización laboral, por tierra y vivienda. La campaña para ganar el voto al Frente de Izquierda Unidad tiene el desafío de avanzar en la organización para enfrentar el ajuste de Massa y de todos quienes gobiernan en el presente. Esa perspectiva nos prepara de la mejor manera para enfrentar la etapa que se viene.

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