Políticas

22/1/2020

Elogios del imperialismo a Argentina en la “cumbre antiterrorista”

Si Pompeo te felicita…

Argentina recibió calurosas felicitaciones por parte del gobierno de Trump, a través del secretario de Estado Mike Pompeo, por las medidas adoptadas contra Hezbollah. Pompeo no solo se quedó en ello sino que llamó a imitar a la Argentina.


El elogio se dio en el marco de la III Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo que se estuvo desarrollando desde el pasado lunes 20 en Bogotá. La segunda conferencia se realizó en Buenos Aires en julio del año pasado y fue la oportunidad para que Macri incorporara a Hezbollah al listado de organizaciones terroristas así como un bloqueo a sus activos financieros, algo que era requerido por Estados Unidos. El mismo día de inicio de la III Conferencia “el titular de la Unidad de Información Financiera (UIF), Mariano Federici,  informó este lunes que había prorrogado el ´congelamiento de activos de la organización terrorista Hezbollah, sus líderes, y entidades específicas del ala militar que integran la misma´” (Clarín, 20/1).


Las medidas sobre Hezbollah fueron tomadas por el gobierno de Macri e, incluso, al frente de la UFI todavía hay un funcionario macrista, pero lo cierto es que el gobierno de Alberto Fernández continuó esa política que Mike Pompeo alaba y recomienda. La insinuación por parte de Sabina Frederic, ministra de Seguridad, de que había que sacar a Hezbollah de la lista de organizaciones terroristas motivó una rápida reacción del canciller Felipe Solá y la ministra se desdijo. No ha pasado desapercibido el hecho de que el primer viaje de Alberto Fernández como presidente sea a Israel y se entreviste con su par Netanyahu. Incluso algunas versiones periodísticas atribuyen la resolución de viajar a Israel a un consejo de CFK, como una “astuta decisión” en el medio de las negociaciones de la deuda. Este tema, el de conseguir respaldos en la renegociación de la deuda, es para algunos comentaristas políticos el objetivo principal del viaje.


El dato más importante, tal vez, es que Argentina se mantiene dentro de estas cumbres armadas por el imperialismo con el objetivo de tener bajo su férula la militarización creciente de América en el marco de rebeliones populares, como expresión directa de las consecuencias de la crisis capitalista, y también de su guerra comercial con China.


De esta tercera conferencia participaron Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, República Dominicana, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía y en calidad de observadores asistieron: Israel, México, Uruguay, representantes de la oposición venezolana, el Comité contra el Terrorismo de las Naciones Unidas, el Comité Interamericano contra el Terrorismo (OEA), Interpol y Ameripol. La conferencia se realizó en el medio de nuevo paro general y la salida de miles de trabajadores colombianos a la calle, que lo hicieron frente a la agudización de la crisis y penurias que viven los trabajadores, pero incorporando la denuncia por los asesinatos de activistas y luchadores (23 en lo que va del año) y el espionaje.


Las conferencias sirven para impulsar desde acciones comunes (ejercicios militares por ejemplo) hasta la condena a organizaciones (y no solo a Hezbollah). En esta conferencia han salido contra el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el GAO-r (Grupo Armado de Organización Residual, un sector disidente de las Farc) que actúan en Colombia, que no son parte de los “acuerdos de paz” firmado entre el gobierno del ex presidente Juan Manuel Santos y la guerrilla.


Esta conferencia, en particular, habla –siempre con la excusa del “terrorismo”- del espionaje en internet en el punto 17 del documento. Todo esto en momentos en que estalló un escándalo en Colombia por el espionaje ilegal por parte de las Fuerzas Armadas contra políticos opositores.


Venezuela


El “tema Venezuela” dominó la III Conferencia. Por un lado Juan Guaidó viajó especialmente  para tener una entrevista con Mike Pompeo, donde “hablaron de posibles futuras sanciones contra funcionarios del régimen de Nicolás Maduro” (CNN, 21/1), a su vez el secretario de Estado yanqui resaltó la importancia de la lucha contra Hezbollah como parte del combate con el gobierno de Maduro, al que acusa de proteger a la organización libanesa.


En las vecindades de Venezuela se levantó esta tercera cumbre como parte de las presiones para forzar la salida de Maduro del gobierno. Pompeo, ya en suelo costarricense, reclamó elecciones en Venezuela y Nicaragua.


El gobierno de Alberto Fernández se ha mantenido en el grupo de Lima, participa de las “cumbres antiterroristas” que arma Trump, no condena el asesinato de Soleimani, viaja a Israel y sostiene a Hezbollah en la lista que dictó EE.UU. La política exterior del gobierno en su esencia está emblocada con las necesidades del gobierno de Trump.