Como parte del acuerdo entre el FpV y el macrismo, la Legislatura porteña aprobó la construcción de un mega-shopping por parte de la empresa Irsa en terrenos ferroviarios de Palermo. Nada menos que 24 mil metros cuadrados del barrio.

Lo curioso es que Irsa, propiedad del empresario Eduardo Elsztain, comenzó la obra hace más de un año atrás, cuando todavía no había contado con la aprobación de los legisladores. La zona está especificada como “urbanización futura”, lo cual obliga a que cualquier construcción cuente con la expresa autorización de la Legislatura. O sea que durante un año fue un verdadero “okupa”.

Sin embargo, la empresa Irsa no tuvo problemas en comenzar las excavaciones, pues contó con la aprobación del gobierno nacional y del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, quienes finalmente aprobaron su construcción mediante un acuerdo que incluirá también la creación de un lujoso barrio de torres en la ex Ciudad Deportiva Boca Juniors, por el cual Irsa le entregará “de regalo” 15 millones de dólares al gobierno macrista.

Aún cuando todavía no contaba con la aprobación correspondiente para el emprendimiento, el gobierno nacional se ocupó de desalojar a las 35 familias que habitaban en el lugar para que pudieran comenzarse las excavaciones. Resulta más que evidente que Elzstain -quien también es titular del Banco Hipotecario- es una viga maestra del acuerdo entre el macrismo y el kirchnerismo en la Ciudad.

Mientras tanto, el barrio de Palermo sufrirá un enorme despojo con la entrega de decenas de miles de metros cuadrados. De este modo, se agudizará la tendencia a la expulsión de los vecinos y trabajadores, la que ya viene ocurriendo durante la última década y la cual significa la destrucción del barrio para dejar vía libre a la especulación inmobiliaria.