El martes 23 de enero sesionó el Concejo Deliberante de Hurlingham para tratar los proyectos de ordenanzas sobre materia impositiva. En el año 2022 había 25 atributos de tasas; ahora hay 35. Se incrementaron los tipos de impuestos, que se suman al aumento de las Tasas de Servicios Generales (TSG) que presentan incrementos descomunales seccionados por zonas.

Un ejemplo de esto es que una vivienda en la zona 2, que estaba pagando en enero $6.119, pasa a pagar $11.581, lo que implica un aumento del 89,25%. Este caso reseñado presenta un descuento del 15% por no poseer deuda, de lo contrario la tasa mensual a la fecha sería de $13.625 según consta en la misma boleta. Claramente Hurlingham tiene una de las TSG más onerosas de la zona.

Otro ejemplo: un baldío de la misma zona que pagaba $6.504 en enero, pasó a pagar en febrero $11.785, un 81,19% de incremento. Y un inmueble en la zona 4 en Vergara, zona comercial, también con descuento del 15%, que pagaba $3.495 hasta enero, pasó a abonar $6.152, lo que significa un incremento del 76%. Insistimos, estos valores aparecen en el caso de poder pagar todos los meses; en el caso contrario, que es lo que ocurre con la mayoría de los vecinos, el nominal es un 15% más. Hurlingham, según trascendidos, revela una tasa de cobranza del 30% de estos valores; de esto se desprende la causa de la morosidad en los pagos.

A estos significativos incrementos se suman nuevos impuestos a los combustibles, a los cajeros automáticos, al ingreso y salida en autopistas, a la recolección de poda que supere el metro cubico y a otros sectores (lo que encarece el costo de vida en el distrito, ya que estos impuestos son transferidos por los comerciantes al consumidor). Es decir, que además de las tasas, colocan otros ítems que antes no existían para diversificar el aumento. Es por ejemplo el caso de la “Tasa Lumínica” (Art. 65 O. Impositiva), que implica ofrecer por parte del municipio el “servicio de mantenimiento del servicio de alumbrado” (Art. 109 O. Fiscal) el cual no solo es cobrado en la boleta de TSG sino que a la vez es facturado por la empresa distribuidora de la energía eléctrica con el ítem de “Tasa municipal por alumbrado público”. Por ello es que el municipio afirma que el incremento va del orden del 40% al 190% (El 1 Digital) pero la realidad es que si se suman todos los ítems el impuestazo puede llegar al orden del 1000% (Buenos Aires Ahora).

Delegación de facultades a Selci

Al parecer, las nuevas autoridades tienen temor a quedarse cortos con el robo a los contribuyentes, por lo que agregaron facultades especiales al Ejecutivo para poder incrementar valores según disponga sin necesidad de reunir al Concejo Deliberante. Así consta en el art. 4 de la Ordenanza Impositiva: “El Departamento Ejecutivo podrá modificar alícuotas, módulos, montos y tramos de cualquier tributo de las Ordenanzas Fiscales e Impositivas a los fines de determinar la equidad tributaria.” (…) “Quedará facultado a establecer cualquier otro índice, coeficiente o cantidad de módulos” (…) “Todas las tasas y derechos se reajustaran en forma mensual y consecutiva” (O. Fiscal, art. 23).

Es decir, la novedad es que el intendente Damián Selci aumentará impuestos cuando quiera, indexándolos a la inflación. Son los incrementos que no le otorga a sus trabajadores municipales, que tienen sueldos miserables. No habría indexación mensual para los salarios pero sí para robustecer las cajas municipales.

La votación dejó en evidencia a una oposición cómplice

“El aumento fue sancionado con los votos de los concejales del PJ, Nuevo Encuentro y La Cámpora, más la vicepresidenta primera del HCD, Marisol Fernández, de Juntos por el Cambio.  Por su parte, votaron en contra el resto de los concejales de Juntos por el Cambio (con la ausencia de Lucas Delfino), y los dos de La Libertad Avanza” (El 1 Digital). Esto demuestra la complicidad entre los bloques.

En Hurlingham, el ajuste de Milei lo llevan adelante La Cámpora de Selci y compañía. En Hurlingham, JxC rechaza las facultades especiales pero las defiende para Milei votando la Ley Ómnibus. Una bancarrota política que como vemos está rompiendo a los cómplices de JxC, lo que se ve en la ausencia de Delfino y el voto a favor de Marisol Fernández. Ni que hablar de la duplicidad de La Libertad Avanza. Todo esto manifiesta que ninguno de los bloques del Concejo Deliberante defiende algún interés popular.

La lucha contra la política de Milei debe ir de la mano de combatir sin miramientos el ajuste en los municipios y de los gobernadores, todos ellos quieren cargar los costos de la bancarrota capitalista sobre las espaldas de los trabajadores.

Por eso planteamos la apertura de los libros municipales, los vecinos no tienen menos derecho que el Ejecutivo a conocer en que se emplean los recursos fiscales, control de los mismos por los trabajadores y vecinos. Aumento de emergencia para todos los trabajadores municipales e indexación automática por inflación. Salarios igual a la canasta familiar. Reapertura y expropiación de la Clínica Sagrado Corazón. Por un plan de viviendas populares y manutención de los comedores populares. Pase a planta permanente de todos los trabajadores que cobran planes sociales y ejercen tareas en el municipio. Basta de precarización. Abajo el tarifazo.

Este plan de guerra contra los trabajadores es enfrentado por la asamblea popular de Hurlingham, que debe tomar la lucha tanto contra el ajuste del gobierno municipal peronista como contra la Ley Ómnibus y el DNU de Milei.

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