Más de 300 vecinos de Orán, la se­gunda ciudad en importancia de Salta, se movilizaron para rechazar la ‘auto­gestión’ hospitalaria. La iniciativa la tomó la dirección local de ATE, encabe­zada por Ramona Riquelme, que salió a explicar a los barrios que la autoges­tión es lo mismo que la privatiza­ción. Se denunció la llegada al Hospital de una consultora italiana que viene a registrar el movimiento contable y esta­blecer la posible facturación y el volu­men del negocio en una futura privati­zación.

Ahora numerosos barrios preparan con ATE una gran movilización para el 10 de diciembre.

Los compañeros de ATE Orán han sido la vanguardia de la lucha contra las tercerizaciones desde febrero de este año, lo cual contrasta con las vacilacio­nes y la adaptación de ATE central, que ha apoyado la participación de trabaja­dores en los consejos de administración de los futuros hospitales de autogestión. Además, concentraron el reclamo en la derogación de la cláusula de la ley que preveía que el hospital de autogestión colocaría a sus trabajadores bajo el régi­men privado. El gobierno derogó final­mente esta cláusula (lo que no le impe­dirá someter a los trabajadores a regí­menes flexibilizados que ya hoy aplica contratando médicos por 500 pesos sin beneficios ni estabilidad alguna) para salvar y ratificar la aplicación de la autogestión.

La campaña de plenarios y asam­bleas que estamos impulsando para po­ner en pie un Frente de los Trabajadores en toda la provincia ha encontrado eco en los compañeros de Orán. Ellos en­tienden, como nosotros, que es tiempo de romper con la política patronal, para poner en pie la organización política independiente del movimiento obrero.

Ya hubo 3 despidos en prensa y 14 en gráficos. Compañeros que se­guían contratados incumpliendo el convenio y la ley, deben ser reincor­porados ya y efectivizados. Así comienzan los despidos. Reincor­poración inmediata.

La línea de la patronal es men­tir. La de los sindicatos, evitar las luchas.

Pero Crónica puede cortar la ca­lle, convocar a Plenarios de los dele­gados de gremio en la puerta de Crónica, a los medios, hacer asam­bleas donde los compañeros deci­dan, afuera o adentro. Ningún des­pido. No al cierre. Defender una de las mayores fuentes de trabajo de ambos gremios.

Todos estamos en el mismo bar­co.