Después de mucha alharaca, toda la “oposición” a la Intendencia del PJ (felipista) terminó votando el Presupuesto 2005 por unanimidad (UCR y ARI). Es que la búsqueda de un espacio político propio es muy difícil para quienes han sido cooptados por la gobernación y el gobierno nacional. El radicalismo se opuso al pase a planta de 80 trabajadores municipales (clientelismo de Mascheroni), pero no reclama que todos los planes Trabajar -sin excepción- pasen a planta y que se financie el gasto con un impuesto extraordinario a las grandes fortunas (especialmente la de los terratenientes).

 

Lo siniestro de este voto es que Mascheroni lleva adelante el gobierno más pobre de la historia de Pehuajó. En esta gestión de año y medio no se ha hecho absolutamente nada.

 

En el presupuesto faltan las partidas para obras públicas necesarias e impostergables para dar solución al grave problema de cloacas, agua potable, hospitales y salas de barrios, construcción de viviendas, Refugio de la Mujer golpeada, asfalto, etc., etc. Mascheroni mantiene los salarios de los municipales por debajo del nivel de la pobreza y sigue con el trabajo en negro y la explotación de los planes Trabajar.

 

El Partido Obrero denunció públicamente los acuerdos entre la Intendencia y la Cooperativa Eléctrica (una verdadera caja negra para financiar la campaña electoral y camuflar todos los negociados que se hicieron a costa de los vecinos a través de esta verdadera “intendencia paralela”).

 

Para votar el presupuesto del ajuste, todo el justicialismo terminó uniéndose contra el pueblo pehuajense (Mascheroni, Salemme, Martín, el capitoste de la cooperativa). La solicitada del Partido Obrero tuvo un enorme impacto político en Pehuajó. El PO, al denunciar el presupuesto del hambre, polarizó con el PJ y la oposición trucha. Para profundizar esta polarización, el Partido Obrero impulsa la construcción de un Frente de izquierda y de los sectores en lucha, por una alternativa obrera y socialista.