Políticas

12/9/2013|1285

Entrevista con Martín Dalmau: “La elección de la izquierda ha cambiado el humor de los trabajadores”

Martín Dalmau es profesor de Historia, recibido en la Universidad Nacional de Cuyo, y tiene 40 años. Proviene de un hogar de trabajadores, donde comulgaban las ideas de izquierda con el peronismo. Es hijo político del Argentinazo, el cual lo motivó a impulsar la construcción del Polo Obrero y el Partido Obrero en la provincia. Es dirigente de la oposición docente a la burocracia del Sute, que por escasos 30 votos le arrebató la victoria en la seccional Las Heras.

-¿Cómo ves el proceso político en Mendoza luego de las Paso?


-Con muchas posibilidades para el Frente de Izquierda. Los partidos patronales se disgregan y retroceden. La burguesía está espantada, dividida y sin un plan para enfrentar la crisis. Para los K, una cosa es tener de oposición a un ganso (el Partido Demócrata) o un radical, los que apelan al ‘diálogo’ con el gobierno para salvar los capitales amigos. Otra cosa es una oposición de izquierda: nosotros apelamos a la movilización de los trabajadores para imponerle a las patronales y su Estado nuestras reivindicaciones. La elección de la izquierda en Mendoza ha cambiado el humor de los trabajadores.


-¿Qué opinión te merecen las encuestas que se están difundiendo?


-No le damos mucha importancia, generalmente son parte de operativos de prensa a favor de una u otra lista patronal. Lo que es seguro es que estamos avanzando. Nosotros tenemos otra forma de medir la adhesión, hacemos un planteo al pueblo trabajador y vamos analizando cómo se procesa, qué devolución tenemos. En el último tiempo, ese diálogo es mucho más fluido que antes. Eso se expresa en una fuerte corriente de simpatía al Frente de Izquierda y al PO, lo que se expresa en la multiplicación de nuevos organismos partidarios y comités de apoyo. Vamos a subirnos a la cresta de la ola para llegar lo más lejos posible. Las conquistas parlamentarias deberían ser el parto de la criatura -es decir, la expresión de un gran desarrollo de la izquierda revolucionaria en Mendoza.


-¿Cómo pensás que se debe encarar la próxima etapa de la campaña?


-Ahora vamos a ir a una polémica más fina, más delicada. Vamos contraponernos con los planteos municipales y provinciales de los partidos patronales, estableciendo un programa de resolución a los problemas del pueblo explotado y la juventud en todos los planos, bajo la dirección de la clase obrera. Enfrentar el déficit provincial, que engrosa casi cotidianamente “Paco” Pérez, va a ser uno de los principales ejes de la campaña, pues se está hipotecando la provincia para garantizar las ganancia de los capitalistas. Sin ir más lejos, los trabajadores estatales de la salud reclaman aumentos salariales y el gobernador les responde que la provincia está quebrada, que tenemos que hacer un esfuerzo. Pero inmediatamente se reúne con empresarios y les ofrece una línea de créditos blandos. También el rechazo a la instalación de las megamineras contaminantes y cualquier actividad relacionada a la extracción de petróleo mediante el fracking en manos de monopolios capitalistas. El gobierno mendocino no se pronunció sobre el acuerdo Chevron-YPF, aún cuando Vaca Muerta ocupa parte del territorio mendocino y ellos -el gobierno e YPF- están dispuestos a entregar todo por dos monedas. La oposición es peor en su entreguismo, porque no sólo plantea la devaluación a gran escala -como exigen Vale y las mineras-, sino que también quieren que el decreto Chevron-YPF se generalice como política económica. La crisis del transporte, la educación, el trabajo, la salud y la cultura también serán ejes de la campaña provincial.


-¿Querés agregar algo más?


-Sí, convocar a todos los trabajadores de Mendoza a desenvolver una gran movilización política para el ingreso de tribunos de la clase obrera a la Legislatura y a los concejos municipales. Vamos a impulsar la deliberación política en cada taller, fábrica, escuela, facultad o repartición pública.