Políticas

25/10/2016

Festa, intendente de Moreno: 10 meses de gobierno y una crisis imparable

Partido Obrero Moreno


La crisis general que afecta desde hace un tiempo a la gestión del intendente camporista Walter Festa –quien solo lleva 10 meses al frente de la intendencia de Moreno- no ha hecho más que profundizarse. En lo que va de su gobierno, el mandatario municipal incumplió con todas sus promesas de campaña.


Las más resonantes fueron: la construcción de doce jardines de infantes, la reparación de las calles, el boleto estudiantil municipal, la auditoría integral de las cuentas del municipio y la municipalización de la recolección de residuos, hoy en manos de la empresa El Trébol, que embolsa una suma millonaria por un pésimo servicio. Mientras la mayoría de las escuelas se encuentran en situación de emergencia edilicia, el fondo de financiamiento educativo -unos $90 millones- brilla por su ausencia.


Otra cuestión de suma urgencia que sigue sin solución es la del transporte público. La empresa de colectivos La Perlita explota los recorridos en el distrito bajo un contrato del año 2003, que venció hace más de tres años y que fue prorrogado de manera indefinida por la gestión West. Desde que asumió como intendente, Festa no ha llamado siquiera a una sesión para discutir el tema en el Concejo Deliberante.


Crisis de gabinete


Antes de cumplir un año de gobierno, la gestión Festa ya sufrió pérdidas en casi todas las carteras de gobierno: Salud, Economía y se fue hasta la presidente del Consejo Escolar. A esto se sumaron los escándalos de corrupción ligados al intendente, que tuvieron su expresión en el video que se viralizó por las redes sociales y medios de comunicación donde se ve a su ex asesor Oscar Siburu exigiendo a un comerciante 10 mil dólares a cambio de una habilitación municipal.


Por su parte, la relación política con la primera en línea de sucesión, la presidente del Concejo Deliberante, Cintia González, ha quedado reducida casi a la nada, situación ésta que amenaza con dinamitar el endeble bloque de concejales. En este sentido, hace algunas horas se dio a conocer la renuncia del concejal Camps al bloque del FpV, quien anunció un acercamiento al bloque del Frente Renovador.


Con esto, queda demostrado que la derrota de los caciques del Conurbano es solo una arista de la crisis general que atraviesa el PJ y los partidos tradicionales.


 


Una alternativa obrera y socialista


Moreno es un distrito con más de 600 mil habitantes, con un crecimiento demográfico exponencial, que pone sobre la mesa de debate la cuestión de la tierra y la vivienda, la urbanización de los barrios más carenciados y los negocios inmobiliarios a través de la obra pública.


El distrito cuenta con un solo hospital, con un presupuesto que no alcanza siquiera para mantener las condiciones más básicas de trabajo y atención de los pacientes. El narcotráfico y las redes de trata penetran y carcomen las barriadas más empobrecidas ante la atenta mirada cómplice de las fuerzas de “seguridad”.

 


Los Assef (PRO) y los Barreiro (PJ) empiezan a alzar la voz solamente para convertirse en otro recambio intrascendente de la realidad nefasta de un distrito destruido y empobrecido por los que han venido ejerciendo el poder político hace décadas.


El Partido Obrero plantea:


*Apertura e investigación de libros contables del municipio. 

*Juicio y castigo a todos los corruptos.

*Plan de obras públicas municipales, con mano de obra desocupada y bajo gestión de los propios trabajadores, para terminar con los negociados de las empresas contratistas.

*Plan de construcción y urbanización de barriadas obreras, con mano de obra desocupada contratada bajo convenio. Sobre la base de un impuesto extraordinario al gran capital (Bingo)

*Aplicación inmediata del fondo de financiamiento educativo.

*Triplicación del presupuesto para salud.

*Estatización sin pago del servicio de recolección de residuos para no dilapidar el presupuesto municipal en ello.

*Estatización sin pago de la empresa de transportes La Perlita.