Políticas

6/1/1994|410

Frente de lucha en Santa Cruz

Frente al vencimiento de la “ley de emergencia económica”, el gobernador Kirchner promovió una nueva ley que transforma en “permanente” una parte de la anterior y que avanza sobre las conquistas jubilatorias de los empleados provinciales, además de anular las cláusulas salariales de gremios provinciales con convenio nacional que también quedan anuladas para siempre (bancarios, TV, viales, Luz y Fuerza, OSN), y la ley de enganche.


En el aspecto jubilatorio se exigirán ahora 20 años de aportes contra los diez que se exigían hasta ahora. Un trabajador fallecido por accidente de trabajo no dejará pensión si no tiene diez años de aportes a la Caja. Esto es sólo el principio de una “Ley de fondo” que bajará los porcentajes jubilatorios que hasta ahora se respetan en la provincia.


Ante este nuevo ataque (votado conjuntamente por radicales y justicialistas), se realizó una reunión de la que participaron los judiciales (provinciales y nacionales), Adosac, Luz y Fuerza, ATE, además del Movimiento de Derechos Humanos y Frente Unico de los Trabajadores. La reunión aprobó una jornada de protesta, que consistió en el reparto de una declaración el día del aniversario de Río Gallegos, y un programa especial de una hora en una FM local.


La declaración denuncia la falsedad del alegado déficit de la Caja de jubilaciones y exige el pago de las deudas que el Estado mantiene con la Caja; también reclama la plena vigencia de las conquistas jubilatorias y los convenios laborales. Plantea la anulación de la ley de “emergencia permanente”, el aumento salarial y el control de los trabajadores y jubilados sobre la Caja de Previsión.


La Jornada fue la única manifestación de oposición a estas reformas reaccionarias y abre la posibilidad de nuevos acuerdos de lucha entre los participantes ante el agravamiento de la crisis en la provincia de Santa Cruz.


Poco antes de fin de año, el gobierno anunció el congelamiento salarial para todo el ’94 en razón de que “sobran” 7.000 empleados. Kirchner amenaza con despoblar la provincia en una versión local del “ajuste” que ya hizo estallar a otras provincias.