Políticas

20/5/2023

Fuera el narcotráfico de Las Antenas: vamos por centros de atención integrales para el consumo problemático

Proyecto de Juan Romero, concejal del PO FIT-U en La Matanza

Foto: Fede Imas

Este sábado se realizó una conferencia de prensa en el Concejo Deliberante de La Matanza que explicó el proyecto del concejal Juan Romero (Partido Obrero-FITU) de centros integrales para el tratamiento del consumo problemático de drogas en el barrio Las Antenas.

Participaron Gabriel Solano, precandidato a presidente por el PO FIT-U y actual legislador porteño; Romina Del Plá, diputada nacional y precandidata a vicepresidenta por el PO FIT-U; Guillermo Kane, diputado provincial; Gabriela de La Rosa, dirigente nacional del Polo Obrero; y Juan Romero, autor de la iniciativa. Se hicieron presentes diversos medios, trabajadores y vecinos de los barrios del distrito.

Como señaló Romero, el proyecto de ordenanza “es la conclusión de múltiples recorridas y charlas con vecinas y vecinos del barrio. Es importante destacar la elaboración colectiva de esta propuesta ya que responde a necesidades muy sensibles por parte de las familias matanceras”. Propone la creación de un Centro Integral para el tratamiento de consumos problemáticos en el Barrio Las Antenas, con el objetivo de “proteger y promover la salud de la población y contribuir con la lucha de las/los vecinos del Barrio Las Antenas de Lomas del Mirador contra el avance del narcotráfico” (expediente 14.602/23). La perspectiva es extenderlo a otros barrios de La Matanza.

El proyecto explicita que el Centro debe construirse en un espacio físico que brinde orientación, asistencia, atención a personas y/o familiares, tratamiento ambulatorio y que realice actividades de prevención. Debe contar con una planta de salud profesional (accediendo a los cargos por concurso, respetando la carrera profesional hospitalaria bajo la modalidad de planta permanente) y trabajadores que articulen actividades recreativas, deportivas y de formación de oficios. La gratuidad e integralidad es fundamental. Como señaló Gabriel Solano: “las familias trabajadoras hoy no tienen acceso a la rehabilitación del consumo, los establecimientos que existen son privados y salen una fortuna. No hay ninguna institución pública que se dedique a tratar esta problemática que no para de crecer”.

En La Matanza, existen lugares como “granjas” y CPAs y sus extensiones, pero son insuficientes. Tienen deficiencia de insumos, personal y de infraestructura a raíz de los constantes recortes presupuestarios; esto provoca que funcionen con cupos limitados y en días y horarios muy reducidos. Pero además, esta red colapsada convive y se relaciona cotidianamente con casas gestionadas por las iglesias, haciendo que la norma de los tratamientos del consumo problemático sean hacer eje en el “adicto”, es decir, solo en los individuos que consumen. El Estado se desliga una vez que el individuo deja de consumir sin ningún tipo de garantía de sostén de un proyecto de vida laboral, educativo, etc., alimentando las reincidencias pero también abonando la idea de que es el individuo quien debe “salir”. Este aporte ideológico es clave para los partidos patronales en el poder, porque apunta a la meritocracia y la resignación a la precarización laboral, llevando una problemática de orden social al plano del individuo consumidor como base del narcotráfico, como sostuvo Romina Del Plá: “es importante además que estos centros sean públicos, gratuitos y laicos. Que sean espacios con profesionales de la salud para el acompañamiento de las personas que se encuentran en esta situación de vulnerabilidad y dependencia. Pero que también sea un espacio de contención para las familias”.

El proyecto brinda una respuesta en lo inmediato para quienes se encuentran en una situación de vulnerabilidad ante el consumo, pero va de la mano de los reclamos de trabajo genuino y de urbanización barrial en La Matanza, presentes en las recientes medidas de lucha de la Unidad Piquetera, por ejemplo. Gabriela de La Rosa señaló: “tenemos muchos compañeros procesados por luchar, por organizarse en sus barrios contra el avance del hambre, la desocupación y también contra el narcotráfico. Los políticos capitalistas utilizan el instrumento de la justicia para atacar a quienes luchan y se organizan. El Estado responde, pero abriendo paso a la descomposición social, arrojando a los pibes y nuestras familias al narcotráfico. El lugar que no ocupa la organización social en las barriadas obreras lo ocupan los narcos”.

La Matanza que gobierna Fernando Espinoza es una zona liberada. El narcotráfico no puede desarrollarse sin la connivencia policial y judicial. Como dijo Guillermo Kane: “las reacciones populares vienen siendo varias: los vecinos de Las Antenas levantaron barricadas contra el copamiento del barrio, los vecinos de Celina se vienen movilizando, las acciones de lucha de los choferes denunciaron la complicidad del Estado y de [el ministro de seguridad Sergio] Berni en la liberación de las zonas para el delito. Cuando el Partido Obrero hace esta presentación está expresando una tendencia de lucha muy fuerte en La Matanza de trabajadores que no se bancan más esta situación y que denuncian que el poder político de Espinoza y el Poder Judicial son cómplices de las zonas liberadas”.

Por ello, otro de los ejes claves del proyecto es el que hace referencia al control vecinal y laico. Consiste en la inclusión de representantes de los trabajadores del lugar, docentes de las escuelas aledañas y representantes de organizaciones de derechos humanos y de las organizaciones barriales presentes en Las Antenas, en la gestión con funciones de control y potestad para solicitar la revocatoria del mandato del directorio del Centro.

El proyecto presentado por el Partido Obrero – Frente de Izquierda Unidad es un punto de partida para replicar en los distintos barrios de La Matanza. La lucha de los vecinos y vecinas de Las Antenas contra el copamiento narco y el consumo es una problemática compartida en diversos puntos del distrito. Con esta iniciativa, intentamos dar una respuesta en lo inmediato, pero también sentar unas bases para abordar la cuestión de fondo: cómo opera el narcotráfico y la responsabilidad política de quienes gobiernan. En La Matanza y en todo el país seguiremos acompañando la lucha para echar a los narcos de los barrios y recuperar a nuestros pibes y familias de la descomposición que este régimen social capitalista nos ofrece.