Políticas
13/10/2016
Fundación Garrahan: el negocio de la “solidaridad” en manos capitalistas
Recolección de tapitas, superexplotación y trabajo en negro.
Seguir
En las puertas del Hospital Garrahan, con un corte de calle, trabajadores de la Fundación que lleva el nombre del establecimiento y que se ha hecho famosa por las campañas “solidarias” de recolección de tapitas y papeles, para “colaborar” con el centro de salud, reclamaron la semana pasada por el despido de 14 trabajadores de esa ONG, de los cuales la mitad figura como monotributista y los demás directamente en negro.
La medida la tomó la patronal porque ellos reclamaron por el despido de uno de los compañeros (es decir que dejaron de darle tareas) y la Fundación respondió quitándoles el trabajo a todos.
Denunciaron que son fleteros que trabajan a destajo para la Fundación y que cada uno de ellos tiene que ir con un acompañante que no está declarado, no es reconocido por la ONG y al cual tienen que pagarle del dinero que reciben de la Fundación por el trabajo que realizan.
Las denuncias que realizan estos compañeros son brutales. Dicen que la Fundación mueve diariamente una cantidad gigantesca de papel: miles de kilos, que se venden a $7 cada uno.
A estos compañeros, que trabajan a destajo, les pagan $256 “la vuelta” o el viaje y, en un día, pueden hacer entre 3 y 4 viajes en doce horas de trabajo. Es decir que pueden llegar a cobrar como máximo un poco más de $1000 diarios que deben repartirse entre el conductor y el acompañante.
La Fundación tiene un depósito en la calle Amancio Alcorta, en Parque Patricios, que fue recientemente inaugurado con mucho marketing, Los despedidos denuncian que en ese lugar también hay compañeros que trabajan en condiciones de semiesclavitud. El planteo de la patronal ante cualquier reclamo es: “si a ustedes no les gusta trabajar así, se van”.
Compañeros de la Naranja de Estatales del Hospital y miembros de la Comisión Interna salimos a acompañar a los trabajadores de la Fundación y nos comprometimos a apoyarlos, a denunciar esta situación y a dar a conocer que no existe ningún fin “solidario” detrás de la ONG, sino que hay una enorme caja negra, montada sobre una brutal explotación de quienes trabajan en ella.
Hemos pedido que se abran los libros de la Fundación porque mientras en el Hospital hay una gran cantidad de carencias y el gobierno restringe el presupuesto, esta gente se aprovecha de las necesidades para armar una empresa “solidaria”, que acumula fondos con destinos, en buena medida, desconocidos.
Apoyamos la lucha de los compañeros, reclamamos la inmediata reincorporación, el blanqueo de todos los trabajadores de la Fundación, que les paguen un salario convencional y que cuenten con todos los derechos laborales. Apertura de las cuentas de esta y de todas las funciones asociadas a los hospitales públicos.