Políticas

25/8/2018

Gran movilización contra la instalación de la base militar yanqui en Neuquén

Una salida de fondo a la crisis abierta

Concejala- Frente de Izquierda Partido Obrero

Se realizó en Neuquén la movilización convocada por la multisectorial “No a la base militar yanqui en Neuquen”, integrada por un centenar de organizaciones políticas, sindicales, sociales, estudiantiles y de derechos humanos, entre otras. 


La importante convocatoria contó con la destacada presencia del dirigente del Partido Obrero y ex diputado por el Frente de Izquierda, Néstor Pitrola, quien realizó una intensa agenda de prensa que ganó gran repercusión en la zona, junto a una destacada columna del Partido Obrero de Neuquén y Río Negro en la marcha. En Cutral Có y Plaza Huincul, el Partido Obrero impulsó se realizó también un acto junto a varias organizaciones.



Le damos una gran importancia política al intento de injerencia norteamericana en América Latina y en la Argentina en particular. En cambio, las fuerzas políticas del kirchnerismo brillaron por su ausencia. Solamente creen en la liberación nacional a partir del rescate de la burguesía nacional. Es que los gobiernos a quienes representan las fuerzas políticas ausentes, se inscriben en esta política represiva, en el pago de la deuda externa y ajuste. Ya ocurrió en Chaco desde el gobierno de Capitanich en 2012 y que fue respondida con una gran movilización popular. Las banderas antimperialistas están en manos de la clase obrera y la izquierda.


En Neuquén, el reclamo fue la anulación de un proyecto iniciado en los gobiernos anteriores de Jorge Sapag (MPN) y Cristina Kirchner (FPV), y que recobró repercusión este año ante la llegada de una delegación del Comando Sur de los Estados Unidos para concretar su emplazamiento en la llamada ruta del petróleo.


El mismo día de la movilización, el título “La base financiada por Estados Unidos está frenada” ganó la tapa del Diario Río Negro. Y según las declaraciones del director de Defensa Civil Luis Giusti, insistió en que se trata de un proyecto de ´ayuda humanitaria´, algo que la Multisectorial refuta y denuncia en términos opuestos. Un emplazamiento de reforzamiento militar para la represión interna, la persecución al pueblo mapuche, las garantías de seguridad jurídica para las empresas petroleras en Vaca Muerta y la guerra intercapitalista por el dominio del espacio (en este caso, ante la puesta en marcha de la base espacial china en Quintuco). La movilización exigió que la anulación del proyecto. Están detenidas las obras, pero está en el presupuesto 2019 del Comando Sur, con varios millones de dólares para cumplir el objetivo. La presencia, hace pocos días, del Secretario de Defensa de estados Unidos, James Mattis, confirma que estamos ante una política continental del Pentágono norteamericano.


Existen una serie de medidas en ese sentido, como quedó manifiesto con el decreto que Macri emitido recientemente de habilitar la represión interna a manos de las fuerzas armadas y, antes, con la llamada “ley antiterrorista”.  Se trata de una escalada bélica de los yanquis con las potencias rivales en el marco de la crisis mundial, al mismo tiempo que se prepara para la represión de las manifestaciones populares contra el ajuste, el pacto con el FMI y la entrega de los recursos.


Al finalizar la marcha se realizó una charla en el Centro Cultural Mariano Ferreyra a sala llena, donde Pitrola compartió el análisis del Partido Obrero ante la crisis abierta tras el ´cuaderno gate´ y el desfile de empresarios y funcionarios que se beneficiaron y benefician con el sobreprecio de la obra pública y las coimas. Contrapuso a ello la necesidad de una iniciativa de independencia política de los trabajadores para derrotar el plan de guerra de Macri, el FMI y los gobernadores, para que la crisis la paguen los capitalistas. A su vez, planteó la necesidad de una agenda de lucha por el paro activo de 36 horas y un congreso de bases del movimiento obrero para romper el bloqueo de la burocracia sindical y las fuerzas políticas patronales que mantienen una tregua con la excusa de "votar bien en 2019". 



Hay que poner en pie una alternativa programática y de poder de los trabajadores ante la crisis del régimen abierta. La que que se profundizará inevitablemente por la crisis capitalista mundial y que requerirá a su turno de la convocatoria a una Asamblea Constituyente, libre y soberana.


En esta perspectiva, el frente de Izquierda está obligado a jugar a fondo y el Partido Obrero inscribe su militancia.


Defensa incondicional de la soberanía nacional y territorial.


Fuera las bases imperialistas en Argentina y América Latina.


Abajo el pacto con al FMI, abajo el ajuste y la represión.


Abajo la Ley Antiterrorista.


Por el gobierno de los trabajadores y los Estados Socialistas de América Latina.