El intendente de José C. Paz, Mario Ishii, es noticia en las últimas horas por ser protagonista de un video que se viralizó donde declara el encubrimiento en la venta de drogas. La declaración textual “yo los tengo que cubrir cuando están vendiendo falopa con las ambulancias” la hizo mientras ambulancieros del distrito reclamaban por ser obligados a trabajar turnos de 12 horas. Con el argumento de encubrir venta de droga, el intendente quería desactivar el reclamo organizado de los ambulancieros que se oponen a la superexplotación a la que está siendo sometido el personal de salud paceño, que se encuentran en la primera línea de combate de la pandemia sin insumos para hacerlo y un cuadro de fuerte deterioro de sus condiciones de trabajo y salariales.

En el video se ve cómo amenaza con la suspensión del personal que no quiera someterse a la jornadas de 12 horas diciendo “si no queres laburar (12 horas por día) ganá el básico y listo” en un acto de prepotencia digno de una patronal superexplotadora.

Finalmente el intendente se coloca como víctima diciendo que “los muertos por la pandemia me lo tiran a mí”. Esta afirmación proviene de quien inauguró junto con el gobernador Axel Kicillof un centro regional de atención al Covid-19 que no tiene los elementos básicos para funcionar y donde se rechazan pacientes por este motivo. Y está dirigida a quienes le ponen el cuerpo a la pandemia todos lo días sin insumos de protección, cobrando salarios de hambre y pagando con su salud la desidia estatal. La caradurez no tiene límites para este “jefe” del PJ.

Este hecho repudiable deja en evidencia el accionar punteril y la impunidad con que se manejan los barones del conurbano como Ishii. Estas modalidades frecuentes las utilizan para gestionar la miseria en un contexto de crisis explosiva contra los trabajadores. Las referencias de Ishii a la “falopa” deberían ser tomadas como una confesión de su parte, la vinculación del poder político con el narcotráfico y el delito mayor es bien sabida.