El departamento de Guaymallén vivió una semana de huelga municipal en reclamo de salarios. El sueldo básico se encuentra en $23.000, una vergüenza. A pesar de la conciliación obligatoria dictada, no parece que se quiera avanzar realmente en la satisfacción de los reclamos de los municipales. Esto lo demuestra el cierre de persianas en la Subsecretaría de Trabajo y también los ataques sistemáticos en redes sociales y entrevistas por parte del intendente Marcelino Iglesias (UCR).

Guaymallén está siendo afectado por un régimen de corruptelas, privatizaciones, beneficios a empresas amigas, y miseria salarial. Esto fue mantenido tanto por el gobierno del peronista-kirchnerista Luis Lobos como por el actual, encabezado por Iglesias.

Las grandes ganadoras de esto son las empresas constructoras, que succionan el presupuesto municipal con concesiones de obras indexadas al dólar que nunca se terminan.

Estamos recorriendo las ferias, parques, plazas de Guaymallen con @FedericoTelera
Enorme despliegue militante de los compañeros del comité departamental para que quede claro que #LaIzquierdaSePlanta pic.twitter.com/JGBQuSCZmC

— Víctor da Vila (@VictordaVilaPO) May 6, 2023

Estos súper negocios contrastan con la realidad de los trabajadores municipales. Sus salarios de indigencia son triturados por la inflación. Más en general, los habitantes de Guaymallén nunca ven satisfechas sus necesidades más urgentes. Abundan la pobreza y el trabajo precarizado en la mayor parte de los barrios obreros.

La orientación privatista y negrera de la gestión de Iglesias no solo tiene el objetivo de que se lucre con el presupuesto público, sino también con la tierra y la vivienda. El gobierno libera zonas para que los desarrolladores inmobiliarios ejecuten emprendimientos a gran escala, sin ningún tipo de permiso ni habilitación, amasando fortunas a costa de la vida de las familias obreras. Lejos están estas obras de generar trabajo en las cantidades que necesita el pueblo de Guaymallén y lejos están de pagar salarios que le ganen a los índices de pobreza.

Esto se ve en las barriadas populares, que no están urbanizadas y tienen calles que están reventadas. Los barrios se inundan a la menor precipitación. El presupuesto que no se invierte en ellos, se lo lleva, en gran medida, la empresa amiga de la casa: Santa Elena.

Esto no puede continuar. Es necesario plantarnos contra Iglesias por el salario, obra pública, urbanización y vivienda. La satisfacción de las necesidades de las mayorías debe estar primero.

Por eso tenemos un paquete de propuestas que incluye la ejecución directa de la obra pública, la urgente urbanización y construcción de viviendas bajo control de los municipales y los vecinos, la utilización de la tierra ociosa para la construcción de casas, la eximición de tasas y la habilitación online de los comercios, la apertura de los libros contables, el aumento de emergencia a los trabajadores municipales, entre muchas más.

Llevamos estas propuestas a la campaña electoral, defendiendo un programa de gobierno que responda a las mayorías trabajadoras, de la mano de Federico Telera como candidato a intendente y de Víctor da Vila como candidato a gobernador.

Sumate a la campaña de la izquierda que se planta para una salida de los trabajadores en Guaymallén.

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