Un centenar de luchadores barriales se reunieron el sábado 17 de octubre en Cipolletti, para desarrollar el primer congreso de "la Tierra y la vivienda". Participaron delegaciones de la asamblea de vecinos sin techo de Villa Regina, barrio Fiske Menuco, de Roca; barrio Islas Malvinas de Allen, diversos asentamientos de Cipolletti, barrio "Hijos del Chacay" de Plottier y una delegación muy destacada del barrio Uriburu de la ciudad de Chos Malal.

 

El congreso surgió como parte de las iniciativas discutidas en la reunión que mantuvieron el Partido Obrero y la Darío Santillán, en oportunidad del apoyo del FPDS a la lista Unidad.

El congreso fue convocado por un llamamiento común con la siguiente consigna: "Contra los candidatos de la especulación inmobiliaria, vamos con el Frente de Izquierda".

 

Luego del informe inicial, el congreso se desarrolló en tres comisiones: organización territorial y barrial, criminalización de la protesta social y urbanización (regularización y servicios públicos).

Las intervenciones en las comisiones dieron cuenta de las enormes experiencias de lucha de la región, en donde resultaron ilustrativos los ejemplos de los vecinos de Villa Regina, que hace más de un año sostienen una asamblea de 140 vecinos sin techo , arrancando un compromiso de lotes sociales al gobierno. También la pelea de los asentamientos 2 y 8 de Mayo, de Cipolletti, por la instalación de los servicios; o la batalla del barrio Fiske Menuco que se opuso a la orden del gobierno local para que  lleve el nombre del asesino Carlos Soria.

 

En el debate se reafirmó un principio elemental: la lucha por las reivindicaciones planteadas deben ser desenvueltas por una lucha independiente del Estado, sus punteros y los partidos patronales.

Las resoluciones finales marcan el gran paso que significó el congreso: se resolvió una campaña por el voto y la fiscalización al Frente de Izquierda, la réplica de la presentación del proyecto de Gabriela Suppicich de un plan provincial de viviendas en Río Negro y en todos los municipios.

 

Una tarea de primer orden que se votó fue la defensa de los luchadores populares, en vísperas del juicio por usurpación a vecinos del barrio Auka Lihuen. Por último se resolvió una mesa del congreso para llevar adelante todas las conclusiones.

 

El congreso concluyó con intervenciones que marcan toda una perspectiva. Los compañeros del FPDS mencionaron que luego de haber decidido llevar la pelea cotidiana al ámbito electoral, encontraron en el FIT una herramienta de expresión política. Gabriela Suppicich y Norma Dardik llamaron a convertir el voto al FIT en un gran pronunciamiento contra el ajuste en marcha.