Políticas

4/5/2006|944

Indocumentado y en negro

Ahora es cuando


En la Villa 1-11-14 se registra una verdadera tragedia. Cientos de trabajadores textiles echados de los talleres buscan con desesperación una pieza para alquilar, en un cuadro donde los alquileres no paran de subir. Les piden por una pieza de dos por tres de 180 a 250 pesos por mes para vivir hacinados con sus familias.


 


En los comedores del Polo, se presentan todos los días compañeros pidiendo un plato de comida para poder comer aunque sea una vez al día. Algunos de los grandes talleristas se han mudado al Gran Buenos Aires, y otros se han puesto a producir de noche para evadir controles.


 


En sus asambleas, los costureros empiezan a levantar reivindicaciones contra el gobierno. El gobierno porteño lanzó un plan —“Patria Grande”- que sólo otorga una documentación precaria. Para constituirse en definitiva, plantea una cantidad de requisitos prosciptivos para la mayoría de los trabajadores indocumentados, como tener trabajo en blanco, hijos argentinos o estar casados con un ciudadano de este país.


 


Los que todavía tienen el beneficio de la súper explotación deben realizar colas interminables en los CGP y en los consulados, para conseguir uno de los 500 números que ahí se otorgan por día.


 


Al hacerlo, pierden al menos un día de trabajo, que no se les paga: en los talleres se cobra por hora en el mejor de los casos, y por prenda confeccionada en el peor.


 


Cuando el Polo se presentó a la discusión con el Gobierno de la Ciudad y reclamó la documentación definitiva y gratuita a cargo del Estado, se nos contestó que los contribuyentes de la ciudad no pueden pagar los trámites en el extranjero de los emigrantes. Sí puede pagar, “en el extranjero”, la deuda usuraria de la Ciudad. Sí puede pagar, a los extranjeros o argentinos, para las movilizaciones truchas que se realizaron a favor de Ibarra.


 


En la cuestión de la documentación, el gobierno ha dejado a los inmigrantes librados a su suerte. Es que en la indocumentación está la base de la superexplotación y de los salarios bajos para toda la industria textil. Telerman continúa a Ibarra, como lo demuestra el nuevo incendio de Flores donde el tallerista hizo salir a los trabajadores por la puerta trasera.


 


El Polo Obrero de la Capital recorre las barriadas para organizar y empadronar a estos compañeros, realizando asambleas permanentes. Lanzamos una gran movilización para el 9/5 en la que vamos a llevar un padrón de miles de compañeros para exigir:


 


-Que el Estado de la Capital garantice la documentación definitiva y gratuita, con la entrega de padrones de las organizaciones sociales.


 


-Amnistía ya para los indocumentados.


 


-Vivienda para los trabajadores textiles sin techo.


 


-Becas para que los pibes no pierdan el ciclo lectivo.


 


Llamamos a todos los compañeros de las diferentes comunidades de emigrantes y sus organizaciones a sumarse a esta gran lucha en función de lograr las reivindicaciones.


 


El 9 de mayo, todos a Jefatura: Ahora es cuándo.