Políticas

21/1/2017

Inundaciones, soja y agronegocio


"Por suerte paró de llover". Estas fueron las declaraciones del presidente sobre las inundaciones que azotan a una parte del norte de la provincia de Buenos Aires y a una parte de las provincias de Córdoba y Santa Fe (más de 70 ciudades).


“La soja favorece la absorción y el drenaje de los campos”, ha expresado Leonardo Sarquís, ministro de Agricultura de la provincia de Buenos Aires en una nota en radio El Mundo (Tiempo Argentino, 18/1). Una mentira descarada para sacar la responsabilidad del actual modelo productivo agrícola.

Rezar para que deje de llover o mentir. Sobre la tala de bosques nativos, el avance indiscriminado de la frontera agrícola, el desplazamiento de la ganadería, de la lechería, ni una palabra.


La deforestación del 12% de bosques nativos en el país entre 2001 y 2014, hace que al desaparecer la cobertura en las altas cuencas no se retengan las precipitaciones. El avance indiscriminado de la frontera agrícola es el principal responsable, basada en la política del agronegocio fomentada desde el gobierno. Una de sus manifestaciones es la lucha del pueblo cordobés para que no se sancione la modificación de la actual Ley de bosques provincial, permitiendo una re categorización de zonas intangibles (rojas) a menor protección dando vía libre a su deforestación posterior.


El desplazamiento de la ganadería y de la lechería, aproximadamente unas 10 millones de hectáreas en la región pampeana, han significado una disminución en el consumo de agua al implantarse más cultivos anuales y menos pasturas perennes y pastizales, lo que ha generado excedentes hídricos que fueron incorporándose regularmente al agua subterránea, determinando su acercamiento a la superficie. Estas millones de hectáreas de pasturas que consumían agua durante los doce meses del año fueron cambiadas por cultivos anuales de bajo consumo, muy rentables, sobre todo la soja, por sobre el maíz o el trigo.


Otro aporte a la baja del consumo de agua es la desaparición de las chacras y de miles de tambos que con sus molinos y bombas extraían grandes cantidades. La siembra directa adoptada en más de 20 millones de hectáreas, con maquinarias muy pesadas que compactan el suelo, ha significado una merma en la infiltración por la reducción de la flora de los suelos a causa de los cocteles de agroquímicos utilizados, que determinan una menor cantidad de poros y ello influye notablemente en la infiltración.


Prueba estos enunciados las investigaciones realizadas por los Ingenieros Bertram y Chiacchiera del INTA M. Juárez (PO 1415)


Un gobierno capitalista que responde a los intereses sociales de los “barones” de la soja y los fondos de inversión jamás puede generar un programa integral de uso del suelo que contemple una planificación que atienda a los problemas ambientales y sociales para los trabajadores. El gobierno


Cambiemos sigue rigurosamente en este punto la política del gobierno supuestamente nacional y popular, para el que también, esperar a que deje de llover era la política protectora del agro negocio.