Al tiempo que impartía la orden de desalojo a los mil trabajadores de la Isla De Marchi, el gobierno convocaba a la presentación de proyectos a grandes desarrolladores inmobiliarios. Ese llamado a licitación aporta indicios poderosos respecto de lo que se propone el gobierno en la isla.

El pliego -que está disponible en la página de la Anses- propone el uso de 131 mil metros cuadrados para estudios y oficinas, un espacio para 15.000 personas y una playa de estacionamiento para 1.500 autos. A renglón siguiente, se prevé la construcción de 90 mil metros cuadrados para productoras privadas y canales de televisión. Como se ve, los planes exceden por mucho al comentado “polo audiovisual”. Los requisitos exigidos a las empresas oferentes sólo podrían ser cubiertos por megaconstructoras: precisamente, se han anotado Irsa (Elsztain) y Consultatio (Constantini). Los “desarrolladores” esperan continuar en De Marchi el desarrollo inmobiliario de Puerto Madero. En este sentido, el “polo audiovisual” sólo sería la cobertura de un negocio más amplio. Por las tierras que saldrían a la venta, se anticipan no menos de 150 millones de dólares en juego (Clarín, 14/10). Mientras tanto, los trabajadores de las actividades de dragado tienen sus puestos laborales en peligro.

El gobierno nacional anunció que invitará a representantes del estado de la Ciudad al “comité evaluador” de los proyectos inmobiliarios. Podría ser el primer paso de una colaboración entre el kirchnerismo y Macri en torno de la privatización de los estratégicos terrenos de la Costanera Sur. A pocos metros de la Isla, el mismo grupo Elsztain tiene proyectado un complejo de doce megatorres, que aguarda su aprobación en la Legislatura (el macrismo no logró hasta ahora el apoyo de los K). Si los desarrollos del “polo audiovisual” también requirieran la venia legislativa, podríamos estar a las puertas de un “intercambio de favores” entre los dos gobiernos. El “combo” se completa con los proyectos inmobiliarios que emergen de la venta de las tierras del ferrocarril Sarmiento, que también deberán pasar por la Legislatura.

De cara a esta realidad, este martes 16 se concretó una acción de protesta con las siguientes consignas:  No a la entrega de la Isla, no al negociado inmobiliario y por la reactivación de la Dirección Nacional de Vías Navegables, Puertos e Industria Naval. La actividad fue convocada por el sindicato de trabajadores de dragado y balizamiento, por ATE y CTA, con la participación de asociaciones vecinales y ambientalistas de la Ciudad y el conurbano. El Partido Obrero de la Ciudad estará presente, junto a trabajadores y vecinos.