Políticas

11/2/2022

Río Negro

Joe Lewis, el usurpador vip de Lago Escondido beneficiado por todos los gobiernos

Prohíbe ilegalmente el acceso al Lago, mientras realiza negociados con el Estado argentino.

La usurpación de tierras sobre el Lago Escondido por parte del magnate Joe Lewis volvió a ser tema de discusión a partir de que un grupo de unos 25 militantes intentó ingresar por el camino de Tacuifí o Camino por El Foyel, pero fueron retenidos por la seguridad privada del empresario inglés y la policía de Río Negro. Quienes se manifestaban por el acceso público al lago quedaron demorados durante largo tiempo. La trama de esta entrega involucra a los sucesivos gobiernos de todos los colores políticos.

En 1996, bajo los gobiernos nacional de Carlos Menem (Partido Justicialista) y provincial de Pablo Verani (UCR), el capitalista británico compró una propiedad aledaña al Lago Escondido, a unos 45 km al norte de localidad rionegrina de El Bolsón. Lo hizo mediante la empresa Properties Buenos Aires S.A., que poco antes de cerrar la operación se convirtió en Hidden Lake S.A. y pasó a ser controlada por la sociedad británica Lago Corp. Desde ese momento, y gracias a sus estrechas relaciones con los sucesivos gobiernos, posee 14.000 hectáreas, realiza negociados con el Estado gracias a su propia central hidroeléctrica y prohíbe el ingreso al Lago Escondido (un espejo de agua al que por diferentes leyes nacionales debería poder acceder cualquier persona del mundo). Incluso existe al día de hoy una resolución del Superior Tribunal de Justicia (STJ) de Río Negro que no se hace cumplir.

A su mansión de 2.500m² para uso personal agregó más tarde un centro de convenciones de 4.200 m² llamado All About Kids, hipódromo, kartódromo, cancha de fútbol donde se diputa la Copa Lago Escondido, de básquet, de tenis, gimnasio, establo para 100 caballos, un centro recreativo con conexión a internet y sala de cine, casa de muñecas y 12 turbinas generadoras de energía eléctrica en los saltos del Río Escondido.

Según el Código Civil de la República Argentina los ríos y lagos son de dominio público (artículo 2340), mientras que la Constitución de la Provincia de Río Negro “asegura” el libre acceso con fines recreativos a las riberas de espejos de agua de dominio público (artículo 73). Aunque en 1994 se creó el Área Natural Protegida Río Azul – Lago Escondido, en 1999 se modificó dejando al lago afuera del área protegida.

Aunque en 2020 el historiador Alejandro Olmos Gaona, mediante un expediente legal presentado en la Procuración del Tesoro de la Nación, demostró que la compra realizada está viciada y por lo tanto es nula, pues en zona de frontera no puede permitirse la compra de tierras de extranjeros, hay que decir que dicho proceso muestra sus límites. Las sentencias a favor del acceso público no han sido aplicadas por ningún gobierno, sea nacional o provincial. El Estado no cae a desalojar y reprimir a Lewis como lo hace con las familias trabajadoras que se organizan y luchan por tierra para vivir, o con los pueblos originarios.

Lewis es como vemos un usurpador vip, protegido y beneficiado por los gobiernos, que además ha venido realizando negociados con todos ellos. Se ha convertido en el principal y único proveedor de energía eléctrica de El Bolsón a través de Patagonia Energía. En la página oficial de dicha empresa puede verse un recorrido de cómo se ha pensado el proyecto desde 1996. Lewis festeja la instalación de Chipre 7 (Central Hidroeléctrica de Paso Río Escondido) en 2020, y que logró ponerla en marcha de manera remota con su fabricante Global Hydro, una firma austríaca que se suma al negocio.

En 2010, durante el primer gobierno de Cristina Kirchner, la Legislatura rionegrina le dio la autorización para poder explotar por 30 años el recurso hídrico, justamente el Río Escondido, y gracias a su central hidroeléctrica accedió al Régimen de Fomento Nacional para el Uso de Fuentes Renovables de Energía -aprobado bajo el último gobierno de Cristina Kirchner y reglamentado por el presidente Macri- que estipula para empresas que incursionen en el rubro $2.000 por Mwh, mientras el megavatio hora alimentado por gas oíl ronda los $560. Por todo, solo debe girar el 12% de las ganancias.

Hay que agregar que nunca presentó un estudio de impacto ambiental, porque como intento explicar en su momento el intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano (un kirchnerista devenido en Juntos Somos Río Negro, el oficialismo provincial), el mismo “pasa por caminos públicos”. Otra absoluta burla cuando prohíben el ingreso.

El empresario inglés se ha convertido en los últimos años en uno de los mayores accionistas de Pampa Energía, del argentino Marcelo Midlin. Un documento presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) confirma que Lewis controla un 4,2% del total de las acciones comunes de Pampa Energía con su compañía local Hidden Lank S.A., y además posee otro 4,5% con Braslyn Ltd, una sociedad radicada en Bahamas -donde vive Lewis. El 19,1% de los títulos están en manos de su management y el 72,9% flota en el mercado (El Cronista)

Como vemos, cada uno de los gobiernos de las últimas décadas han sostenido y beneficiado a Joe Lewis, pues le han entregado y permitido usurpar recursos naturales y explotarlos realizando negociados millonarios.

Basta de entrega y saqueo. Fuera Lewis.