Políticas

30/10/2017

La Calera: los cheques (sin fondo) de Unión por Córdoba-PJ y la campaña del PO-FIT


En los días posteriores a las elecciones del 22 de octubre se dio a conocer por distintos medios que Rodrigo Rufeil, el intendente de la ciudad cordobesa de La Calera, había entregado cheques de $15.000 a los vecinos y trabajadores de la municipalidad para que voten a Unión por Córdoba (UPC), la fuerza liderada por el gobernador Juan Schiaretti. A la maniobra clientelar se sumó una estafa, ya que los cheques otorgados… no tenían fondos.


 


Que UPC tenga que acudir a estas maniobras justamente en La Calera, bastión histórico del PJ en la provincia y cuyo intendente fue el jefe de campaña en la provincia, da cuenta que el peronismo está en franco retroceso.


 


La campaña de UPC


 


Tras la derrota provincial en las Paso, el gobierno provincial apostó fuerte a recuperar el terreno perdido con spots que sostenían la necesidad de “colocar diputados que defiendan a Córdoba en el Congreso”.


 


Tal “defensa de Córdoba” es en verdad un programa dirigido contra los trabajadores cordobeses: la UPC es la principal defensora de la armonización de la caja provincial y responsable del desguace de la industria provincial, con miles de despidos y suspensiones (como en VW, Plascar o Fadea). UPC ha acompañado toda la agenda de ajuste de Macri en el Congreso, apoyando el endeudamiento, la ley de ART y un largo etcétera.


 


La Calera


 


La intendencia de Rufeil se caracteriza por la completa precarización de los empleados municipales, con contratos que se renuevan mes a mes, o directamente mediante pagos con planes como el Vida Digna y la entrega discrecional de “ayudas económicas”.


 


El episodio de los cheques muestra que el aparato punteril ya no le puede garantizar el dominio, en un cuadro de agravamiento de la miseria social –con una creciente falta de estabilidad laboral y de vivienda– que contrasta con el avance de los countries, fundado en la entrega del bosque nativo a los especuladores inmobiliarios.


 


En este escenario se ha dado un gran desarrollo del Polo Obrero y el Partido Obrero en la ciudad, donde mediante la denuncia a los aparatos de los gobiernos hemos venido organizando en las barriadas a los vecinos que salen a luchar por sus condiciones de vida. Entendiendo que es necesario ir a dar una lucha por el poder político, estos compañeros se han sumado a la campaña del Frente de Izquierda con volanteadas, casa por casa, pegatinas, reuniones de fiscales y un enorme acto con más de 100 personas que la coronó.


 


La campaña nos ha servido para estructurar el primer equipo del partido en la ciudad, con el que ya debatimos ir a reuniones abiertas de balance de las elecciones, la edición de un boletín con nuestras posiciones y campañas, y un curso de formación política para sumar nuevos compañeros a esta lucha.