Diana Mondino, quien fue elegida por Javier Milei para ocupar el cargo de canciller en un eventual gobierno suyo, afirmó en diálogo con el diario británico The Telegraph que “en Malvinas los derechos de los isleños deben ser respetados” y que “Argentina tiene que convertirse en un país normal para buscar vínculos más estrechos”. Es decir, confirmó que La Libertad Avanza pretende avanzar en un alineamiento completo de Argentina con el imperialismo, incluso a costa de ceder áreas estratégicas del país. Los únicos derechos que preocupan a los “libertarios” son los del gran capital internacional.

En otra oportunidad, Milei propuso una salida negociada con el gobierno británico. Para ello, dijo que habría que ir hacia un acuerdo como el que realizaron Reino Unido y China en 1977, el cual le abrió al imperialismo un campo de negocios en Hong Kong y en la región en general, que hoy es utilizado para presionar por una mayor apertura económica del gigante asiático y favorecer una colonización por parte de las multinacionales occidentales. Con estos antecedentes, la política de Milei solo nos llevaría a una mayor penetración del capital inglés en las Malvinas.

El Reino Unido quiere preservar su dominio sobre las islas porque acapara sus materias primas y forman parte de un enclave geopolítico estratégico en el Atlántico Sur. Esto adquiere más importancia habida cuenta que el escenario político mundial está dominado, entre otras cosas, por una fortísima guerra comercial. Estados Unidos, que es aliado del Reino Unido, respalda este estado de cosas para mantener ordenado su patio trasero.

En las Islas tienen lugar varios negocios millonarios, entre ellos la pesca, la exportación de lana y carne, la agricultura y la exploración offshore de hidrocarburos. La proporción del PBI generada por el sector pesquero alcanzó en 2022 el 64%; la pesca en las aguas de las Malvinas es llevada a cabo por empresas residentes en las islas, que actúan solas o en conjunto con socios extranjeros, principalmente españoles (Télam, 22/8/2022). El 20% del calamar que se consume en Europa, particularmente en Francia, proviene de esta región.

La autodeterminación de los pueblos no aplica para los usurpadores. Tu posición y la de @DianaMondino es la que sostiene la Corona británica. https://t.co/LyAlOoUkFl

— Gabriel Solano (@Solanopo) September 11, 2023

En las Islas existe un régimen ilegal de pesca, autorizado por el gobierno pirata. Empresas malvinenses, españolas y mixtas usufructúan los beneficios del negocio. Varias de esas compañías poseen filiales argentinas. Además, algunas han sido beneficiadas por el Estado argentino con licencias para operar en la Zona Económica Exclusiva. Por otro lado, el gobierno inglés ha concedido 230 licencias pesqueras a buques españoles, coreanos y taiwaneses (Patagonia.net, 19/3/2018).

Este año, el Frente de Todos denunció el esquema de pesca ilegal ante la ONU, aunque es tributario de ese estado de cosas. Además, mientras realiza este tipo de “denuncias”, deja que en Argentina operen más de 100 empresas británicas, entre ellas Shell, British Petroleum, Unilever y HSBC, las cuales expolian las riquezas que producen los trabajadores y desfalcan al país.

Entretanto, la empresa británica de gas y petróleo Rockhopper Exploration se asoció en 2022 a la israelí Navitas Petroleum para explotar el yacimiento León Marino, ubicado al norte de las Malvinas. Este yacimiento tiene un potencial de producción pico de 80.000 barriles de petróleo por día. El gobierno británico busca reforzar los negocios de la industria pesquera mediante la construcción en 2024 de un megapuerto que reemplazaría al actual.

El nuevo puerto debería servir para abrir rutas comerciales hacia la Antártida, y su construcción estaría en manos de la empresa BAM Nuttall Ltd., que está integrada por capitales británicos y holandeses.

Milei quiere oficiar como correa de transmisión de los intereses imperialistas en las Malvinas. Está tratando de ganarse el apoyo de un sector del imperialismo mundial. Las declaraciones de su candidata y las de él son también un guiño a Estados Unidos, que tendrá que aprobar un acuerdo de este tipo con Inglaterra. Además, los yanquis y los británicos mantienen lazos muy importantes. El gobierno norteamericano y el inglés comparten con Australia una alianza militar llamada Aukus, que tiene a China en la mira. Milei dijo que “rompería” relaciones con el gigante asiático.

El fanático de Margaret Thatcher no se diferencia en nada de la casta política peronista y macrista, que defiende mantener el status quo que impera en las Malvinas. Ningún político capitalista es capaz de encabezar una lucha por la recuperación de las Malvinas, ya que la burguesía nacional, la clase social a la que responden, está vinculada fuertemente a las empresas imperialistas y sus Estados. Con un alineamiento total a las potencias occidentales como el que propone Milei no se abriría ningún curso de desarrollo, sino un mayor saqueo del país.

Por esto es que las respuestas de funcionarios del gobierno nacional, quienes afirman que las declaraciones de Mondino representan una “amenaza para la soberanía nacional”, carecen de toda seriedad. Este gobierno, que está completamente sometido a los dictados del FMI y de las grandes potencias capitalistas, conspira todo el tiempo contra la “soberanía nacional”.

La única forma de luchar contra el imperialismo es rompiendo con el FMI, expropiando a las empresas extranjeras que operan en el país y colocarlas bajo control de sus trabajadores y desconocer la deuda externa. Todo esto está ligado a la lucha por gobiernos de trabajadores en América Latina y en el mundo.

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