El Indec anunció que la inflación de mayo fue de 7,8%, consagrando un acumulado anual de 42,2% y una interanual de 114,2%, lo cual confirma que estos índices continúan en niveles récord, mientras el consumo masivo cae en picada. Esta situación es fuertemente acicateada por los tarifazos en los servicios regulados por el Estado, lo cuales lideran el ranking con un incremento mensual del 11,9%, y permanecen pulverizando los magros ingresos de la población. Sin embargo, muchos políticos y funcionarios salen a querer instalar que aumentar los salarios genera inflación, ¿esto es así?

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Los precios al consumidor (#IPC) aumentaron 7,8% en mayo de 2023 respecto de abril y 114,2% interanual. Acumularon un alza de 42,2% en los primeros cinco meses del año https://t.co/T6MhaPrAc8 pic.twitter.com/xto9xvl8cd

— INDEC Argentina (@INDECArgentina) June 14, 2023

El gobierno viene de autorizarle a las empresas de colectivos y trenes del AMBA la actualización mensual de tarifas, desde marzo a diciembre, según el Índice de Precios al Consumidor (IPC). En lo que va del año, los aumentos ya acumulan un alza de 56% y se deberá sumar el aumento de junio. En el caso de las prepagas, luego de que acumularan aumentos del orden del 114% en 2022, por encima de la inflación, el gobierno lanzó una nueva regulación que condiciona los aumentos al 90% del índice promedio de actualización de los salarios estables del mes anterior. En lo que va del año, estas empresas ya llevan aumentos acumulados equivalentes al 52,8%. A las petroleras le concedieron aumentos mensuales en la nafta del 4%, desde abril hasta diciembre, un rubro donde el alza de precios se traslada al resto de la cadena productiva. En el caso de los peajes, estos aumentaron un 50% en mayo y prevén nuevos aumentos para el mes de agosto.

A esto se suma la segmentación tarifaria, una medida que el gobierno implementó a pedido del FMI para reducir los subsidios en las tarifas de la luz y el gas, y reventar el bolsillo de los trabajadores con aumentazos. En mayo, las tarifas de electricidad percibieron un incremento del 75% y ya acumulan un 400% interanual, en el caso del gas, la tarifa percibió un incremento del 30% en mayo y acumula un 170% con respecto al invierno anterior.

También hay que tener en cuenta todos los “dólar soja”, medidas implementadas por Massa que implicaron el pago de un dólar más caro a las patronales agrarias para que liquiden las divisas retenidas. Estas conformaron una devaluación en cuotas que impactó en el precio de los alimentos, además de constituir un factor de enorme emisión monetaria que permanece fogoneando los niveles inflacionarios.

Mientras todo esto sucede, hay una huelga docente a nivel nacional por aumento salarial, también se encuentran luchando por salario los profesionales de la salud, estatales y municipales, y trabajadores del transporte, entre otros. Esto responde a las paritarias a la baja que imponen las patronales en complicidad con la burocracia sindical y el propio gobierno, quien fijó un techo paritario del 60% para todo el año, que fue quebrado por los reclamos salariales, e interviene deliberadamente en los conflictos en detrimento de los laburantes.

Una investigación del Centro de Estudios para la Recuperación Argentina de la facultad de Ciencias Económicas de la UBA concluye que la inflación afectó más duramente al quintil de más bajos ingresos que al más alto durante los últimos cinco años, ya que su canasta básica sobrerrepresenta a los elementos de mayor nivel de suba de precios. Así, por ejemplo, el primer quintil (el más pobre) gastó un 34,7%  en alimentos, más del doble que el quinto quintil (el más rico).

Según el mismo informe, durante los últimos cinco años la inflación que afecta al 20% de los hogares más pobres es casi 1.5 puntos porcentuales mayor que la inflación que sufre el 20% más rico, una divergencia mucho mayor se da en los últimos doce meses en los cuales fue de 3.2 pp. Estos números demuestran que los efectos de la inflación recaen en mayor medida sobre aquellos sectores que menos ingresos perciben.

Esto quiere decir que las principales víctimas de la escalada inflacionaria son los ingresos de los trabajadores, lo cual echa por tierra la teoría de que los salarios generan inflación y demuestra que solo es utilizada para intentar justificar las paritarias a la baja. Es el gobierno el que la promueve constantemente garantizando únicamente la recomposición de la tasa de ganancia de los capitalistas, en detrimento del bolsillo popular.

Para recomponer los ingresos, hay que luchar por salarios y jubilaciones indexados a la inflación y por echar a los políticos capitalistas que nos trajeron a esta debacle.

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