Políticas

18/9/2003|817

La izquierda y el PO

Las elecciones en la provincia de Buenos Aires han sido testigo del fracaso de la alianza IU-PS.


En esta cruzada, IU estuvo dispuesta a perder hasta los últimos atributos en función de su adaptación al nuevo escenario político, expresando la tendencia a los frentes centroizquierdistas o al electorerismo sin principios. En esta línea, el ex constructor de la Alianza, ex Ari, y jamás socialista, Jorge Rivas definió la naciente coalición como “la izquierda democrática”, es decir del sistema. Habiendo renunciado muy tempranamente a la perspectiva del Argentinazo, la izquierda no tiene hoy otro propósito que la conquista de algún escaño parlamentario a la sombra del proceso de reconstrucción política del régimen.


La alianza IU-PS obtuvo unos tres mil votos menos que la suma de ambos en las presidenciales. La “fuerza de la unidad” se derrumbó por una ley de la física y la política: dos fuerzas que se repelen en un mismo cuerpo impiden que se desplace. Una parte del viejo “socialismo” gorila no quiso saber nada con la izquierda, aunque ésta se vistiera de seda. Una fracción de militantes del Mst y el PC, en ese orden, no votaron a la alianza de sus partidos con el PS.


El PO creció de 61.872 votos a 80.030.