La lucha popular enfrenta la descomposición del Municipio
Por una alternativa obrera y socialista
Desde su triunfo en las elecciones municipales del 2003 (los radicales se derrumbaron después de gobernar la comuna bahiense desde el ‘83), el intendente del PJ Lopes va de crisis en crisis. Las renuncias de gabinete, que comenzaron incluso antes de la asunción, ahora afectaron a la funcionaria encargada del trabajo sucio de reparto de la “asistencia social” en beneficio del aparato de punteros del intendente.
Crisis y corrupción
Acaba de estallar otra bomba, con las denuncias sobre un pedido de coima de 40 mil pesos para la ampliación del bingo, en las cuales están involucrados el principal funcionario de Lopes (Botazzi, un hombre que viene de la Ucd), y otro secretario del gabinete municipal. Para colmo la Intendencia quiere construir un puente en la zona de boliches, a pesar de la virulenta oposición de los vecinos y la movilización de las asambleas vecinales y sociedades de fomento.
Provocación y represión
Bahía Blanca fue uno de los centros de la lucha docente y estatal por el aumento de 250 pesos al básico, impulsadas por el Suteba bahiense (opositor a la burocracia celeste). Mientras la Intendencia ataca al sindicato y a los auxiliares que pararon, la ciudad se ha visto conmovida por una ola de amenazas de bombas en escuelas y jardines que tiene el sello inconfundible de los servidos. El fascista ‘Nueva Provincia’ equipara el desalojo de las escuelas por las amenazas, a los días sin clase por los paros. Desde el riñón del PJ, el concejal Feliú quiere reeditar el "Código de convivencia porteño”. Pese a lo grotesco de este proyecto llamado popularmente "piñón fijo”, el Concejo Deliberante coincide en el propósito de "regular el trabajo en la vía pública y los cortes de calles”. En la mira están las marchas docentes, de desocupados, ahorristas, estatales y bailarines. El próximo 6 y 7 de septiembre se desarrollará el juicio a Marcelo Albarracin, del MTL, y están en lista de espera los procesos a los más de 150 piqueteros y luchadores por los cortes en EG3 y el Polo Petroquímico.
Siguen las luchas
Producto de un reclamo tan elemental como el pedido de zapatillas de baile, el Ballet del Sur no realizó la función de gala del 9 de julio. Esto desató la ira de Solá, que mandó —como represalia- un interventor al organismo para “reevaluar” a todos los integrantes del Ballet.
El miércoles 18, más de trescientas personas marcharon y rodearon el Teatro Municipal, “en defensa de la cultura” y contra la flexibilización laboral en los organismos culturales de la provincia. La decisión de “no innovar” por parte de la Justicia (bajo el peso de la movilización que ha hecho de la defensa de los trabajadores del Ballet una causa popular) ha dejado al garete a la Intendencia. La movilización solidaria de Suteba y de ATE (donde la huelga pasada ha abierto una crisis en la vieja burocracia) ha fortalecido al Ballet del Sur (el pliego de reclamos contempla el control de su presupuesto.
Programa de lucha
Se mezclan en el escenario popular las demandas de los trabajadores y las clases medias, de un lado, y la creciente descomposición de la intendencia justicialista, del otro. El Partido Obrero plantea:
- Apertura de las cuentas públicas bajo control obrero y popular.
- Formación de una Comisión Investigadora de lo actuado por el intendente Lopes y de la campaña de amenazas, a cargo de las organizaciones populares, democráticas, de lucha y representativas de los trabajadores y los vecinos.
- Aumento inmediato de salarios y 250 pesos de aumento al básico para estatales y docentes.
- Plan de obras públicas bajo control y veto de las organizaciones vecinales y de trabajadores.
- Bolsa de Trabajo bajo el control de las organizaciones de desocupados.
- Desprocesamiento de todos los luchadores.
- No al “Código contravencional bahiense”.
Fuera la intervención del Ballet del Sur