Las y los vecinos del predio Nueva Unión, ubicado en Rafael Castillo, vienen encabezando un proceso de recuperación de tierras que alberga a cientos de familias del distrito, y que se suma a otros barrios recuperados de La Matanza. Pero este proceso cuenta con una larga lista de intentos de desalojos violentos y ataques constantes a las familias sin vivienda que lo protagonizan, que fueron impulsados por el gobierno provincial de Axel Kicillof con el aval de la política represiva del gobierno nacional y la ejecución también de esta misma orientación por parte del intendente Fernando Espinoza.

Ya ha pasado más de un año y medio desde que lxs vecinxs ingresaron al predio ocioso. Recordemos que fue allí donde detuvieron injustamente a nuestro compañero Crispin, al cual liberamos con el piquete y la movilización. Las familias han sufrido desde operativos de cortes de energía eléctrica, quema de casillas, golpes físicos y acciones legales contra delegados de la tierra y vecinxs. Así actúa la policía bonaerense de Sergio Berni, que está al servicio de esta política de desalojo y represión a lxs trabajadorxs que pelean por el derecho a la vivienda.

Guernica es la política habitacional del gobierno

Guernica no fue una excepción en los planes del gobierno del Frente de Todos, sino la regla que recorrió todos los procesos de recuperación de tierras que se desarrollaron en el último tiempo, producto del ajuste asfixiante que expulsa de sus viviendas a las familias que dejan de alquilar y son empujadas a situaciones desesperantes.

Esta nueva orden de desalojo no es más que la ratificación de que la represión es una política de Estado, y el derecho a la vivienda digna una deuda que seguirá pendiente mientras crecen a la par los negociados de los gobiernos con la especulación inmobiliaria. Pero no solo eso, sino que, ante todo, la crítica situación habitacional que padecen millones de familias en el país incluso se agravará todavía más al compás del intento del gobierno nacional y todo el arco del régimen político patronal de lograr un acuerdo con el FMI.

En el transcurso de estas semanas hubo un desalojo en Ciudad Evita y otras localidades, por lo cual se convocaron las familias a acampar en el Municipio para obtener una respuesta. En ningún momento el ejecutivo municipal generó una instancia de intercambio o una mesa de coordinación. Lo que consiguieron los vecinos movilizados fue la intervención de la provincia con un censo que llegó sin previo aviso, mientras que el gobierno municipal ha decidido cortar lazos de diálogo que arriben a una negociación donde se haga un plan de pago para acceder a los lotes.

La intendencia de La Matanza es la demostración cabal de la orientación de quienes nos gobiernan, dejando a fuerza de represión a numerosas familias sin techo en la antesala de las fiestas de fin de año.

Ante este nuevo intento de desalojo, las y los vecinos están convocando a una concentración el día jueves 16 de diciembre a partir de las 6:00 de la mañana en la Rotonda de San Justo, para luego movilizar hacia el Municipio, junto a organizaciones políticas y sociales del distrito.

¡No al desalojo para el Barrio La Nueva Unión y todos los barrios recuperados! ¡Por una mesa de diálogo para dar respuestas y derecho a la vivienda!

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