La Municipalidad de Avellaneda tapó un mural histórico del Partido Obrero en el distrito, que reclamaba justicia por Mariano Ferreyra. Tal cual se dedicaran a hacer en los meses posteriores a su asesinato, otra vez más censuraron una pintada que los propios compañeros de Mariano hicieron para pedir justicia; en este caso frente al parque Mujeres Argentinas.

Mientras cometen estos actos de censura, Ferraresi y el Ejecutivo local hicieron una y otra vez “homenajes” cínicos a la memoria de Mariano, buscando ocultar el carácter obrero y socialista de su militancia, y pretendiendo barrer bajo la alfombra que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que el intendente integraba, fue cómplice necesario de aquel ataque mafioso, como se probó en el juicio con las llamadas entre José Pedraza y Carlos Tomada, y con la confirmación de que la Policía Federal, al mando de Aníbal Fernández, liberó la zona.

A Mariano Ferreyra le arrebataron la vida por luchar contra la tercerización en el ferrocarril, un entramado que quedó expuesto a partir de entonces y reveló la complicidad de empresarios, burócratas sindicales y funcionarios en ese esquema. Son los mismos mecanismos de fraude laboral de los que se vale el municipio de Avellaneda para precarizar a sus trabajadores, contratarlos por fuera de convenio y pagarles salarios de hambre.

Llamamos a las organizaciones políticas, sociales y de derechos humanos a repudiar este ataque, y, por supuesto, anticipamos que los compañeros de Mariano volveremos a pintar el mural.

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