Cuando todavía no se habían disipado los gases, aún se escuchaban los ecos de los disparos en Avellaneda y ya la radio hablaba de dos compañeros piqueteros muertos y cientos de heridos y detenidos, los vecinos de la Asamblea Popular de Villa del Parque comenzamos una cadena telefónica para juntarnos y marchar a la Plaza de Mayo en repudio al accionar de este gobierno hambreador y asesino de Duhalde y Cía.

Así fue como a las 18 horas comenzaron a llegar los compañeros a Jonte y Nazca. Primero apareció la bandera de Villa del Parque, después se sumaron las de Villa Mitre y Santa Rita, y todos los gritos fueron uno solo: “Duhalde asesino”, “Que se vayan todos”, “Piquete y cacerola, la lucha es una sola”, y así cortamos toda la avenida.

Esta inmediata respuesta demuestra claramente la vigencia de las luchas de las Asambleas Populares y los lazos comunicantes con el movimiento piquetero, lazos que este gobierno pretende cortar.

Así marchamos por las calles del barrio y en tren para unirnos en la Plaza con las demás asambleas.

Así también marchamos el día jueves en una movilización impresionante del Bloque Piquetero, de la Aníbal Verón, el MTD, los partidos de izquierda, estudiantes, ahorristas, miles de gritos en la Plaza, “nuestra Plaza”, gritos que ahogaron los planes de este gobierno asesino y hambreador.

Compañeros, esto confirma todo un espíritu de lucha vigente y que comienza a madurar en el seno de las Asambleas Populares y del movimiento piquetero: la cuestión del poder.

Los trabajadores estamos obligados a tomar las riendas de este país; no hay otra opción, ellos o nosotros.

Por una Asamblea Popular Constituyente en cada municipio y en todo el país.