Políticas

28/1/2023

Las guerras internas de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires

Aporte al plenario nacional del Partido Obrero del 11 de febrero.

Un cuadro de división del peronismo y la oposición derechista.

Los titulares del PRO, la UCR, la Coalición Cívica y el Encuentro Republicano, que integran Juntos por el Cambio anunciaron sanciones para quienes violen los acuerdos “estatutarios” de la coalición derechista. Una evidencia más que clara de la dispersión y crisis de la derecha que se postula para volver al gobierno y carece de candidaturas unificadas en Buenos Aires y otras provincias.

En un comunicado conjunto que desborda intimidación, Patricia Bullrich, Gerardo Morales, Maximiliano Ferraro y Miguel Ángel Pichetto amenazan con sanciones y prohibición de usar la sigla oficial de Juntos para quienes se corten solos o acuerden por la libre en las provincias. El dictact derechista toma en cuenta el adelantamiento de las elecciones en varias provincias.

La modificación del cronograma perjudica las candidaturas presidenciales y confirma la incertidumbre electoral que recorre a los gobernadores, especialmente a aquellos jefes provinciales peronistas que buscan despegarse de una eventual derrota nacional del Frente de Todos.

Los “presidentes” de Juntos buscan subsanar las tendencias internas dispersivas con todo tipo de alquimias y maniobras, desde las Paso a internas de la derecha o candidatos surgidos de las encuestas electorales. Para esto necesitan tener la rienda corta: la multitud de candidatos derechistas en la provincia de Buenos Aires está pinchando la pretendida “interna competitiva” de Juntos y repele fuerzas en distintas direcciones.

Epicentro de la crisis de Juntos

Es evidente que la provincia de Buenos Aires es uno de los escenarios de fragmentación de Juntos. Bullrich tensiona a la coalición derechista hacia un acuerdo con los “libertarios” de Milei y Espert. A medida que se difunden las primeras encuestas se pone de relieve que la dispersión de candidatos de Juntos en territorio bonaerense, terminaría favoreciendo las ambiciones reeleccionistas de Kicillof en una provincia sin balotaje.

Mientras Ritondo se presenta como el candidato oficial de Macri, Grindetti hace campaña también como candidato a gobernador del PRO a la espera de una definición del expresidente para decidir si salta o no el charco junto a Patricia Bullrich. En la misma anda Joaquín de la Torre, quien se presenta como el referente bullrichista en la provincia de Buenos Aires. Tanto Macri como Bullrich han hecho saber que están dispuestos a unir fuerzas con Milei y los liberfachos para enfrentar al larretista Diego Santilli y a una eventual candidatura de la UCR o alianza del larretismo con una fracción del radicalismo.

La mesa de Juntos por el Cambio quiere disciplinar con separaciones y expulsiones lo que la crisis política y la desintegración de las fuerzas políticas burguesas divide y escinde. En disputa contra Maximiliano Abad, lanzado recientemente como candidato a gobernador por la UCR, Gustavo Posse y Martín Tetaz también radicales, propusieron una alianza con Milei para derrotar a Kicillof y al Frente de Todos. La posibilidad de un acuerdo de Juntos con el otro liberfacho, Espert, viene siendo trabajada desde hace rato por el macrismo a condición de que el facho rival de Milei juegue en la interna de Juntos en la provincia.

Las expectativas de Espert de ser bendecido como candidato oficial de un acuerdo Macri-Bullrich parecen muy poco probable, dada la proliferación de aspirantes derechistas en danza y la propia disputa entre Milei y Espert. La amenaza de una unidad electoral entre Juntos y los “libertarios” con Milei, Espert o ambos adentro, es agitada por Kicillof y el kirchnerismo para reforzar las presiones de integración y subordinación política al Frente de Todos.

A dónde va Kicillof

Baradel, en nombre de la burocracia de Suteba, definió el apoyo a la reelección del actual gobernador como el “mejor plan de lucha”. El camaleónico Juan Grabois hizo público su apoyo a una candidatura de Cristina y Kicillof. Mientras baten el parche de la proscripción de CFK, el kirchnerismo pone todas las fichas en retener la provincia con Kicillof o quien cuadre. Kicillof se muestra como un hombre de orden capitalista abierto a los reclamos de la Mesa de Enlace y de las petroleras off shore, por un lado, y con el control de la policía Bonaerense mediante el mano dura Berni, por el otro.

La crisis de los bloques ajustadores y fondomonetaristas es una particularidad del escenario nacional y provincial condicionado por el pacto de saqueadores con el FMI. Todos bailan el baile del Fondo. Ante la hiperquinética campaña electoral de Axel Kicillof, el otro candidato en disputa para la gobernación bonaerense, Martín Insaurralde, salió a cruzarlo “por izquierda” azuzando que hay que derrotar primero la proscripción de Cristina antes de hablar de candidaturas en la estratégica provincia de Buenos Aires. Una puesta en escena pejotista para trabarlo a Kicillof.

Todo indica que en la reunión de febrero del PJ bonaerense, que “preside” Máximo, va arder troya. Insaurralde busca un acuerdo con Massa para fogonear un candidato a gobernador peronista de la Liga de Intendentes. Kicillof la va de “gestor productivo” a la par que retiene al represor Sergio Berni como ministro y jefe de la Bonaerense.

Plenario nacional por un congreso del Frente de Izquierda

El plenario nacional abierto del Partido Obrero del 11 de febrero inscribirá sus definiciones electorales y de candidatos en este cuadro de división del peronismo ajustador y la oposición derechista, y de enorme crisis nacional. La rebelión popular en Perú contra los golpistas y el fracaso de la asonada bolsonarista grafica los límites que tiene la “topadora” de derechos y conquistas obreras que agitan la derecha y los libertarios. Combatimos a la derecha sin un ápice de apoyo a los Fernández, Massa y Kicillof que son los ejecutores del pacto con el FMI para pagar la estafa de la deuda externa. Incluso en la reunión de la Celac, Lula y Fernández coincidieron en atacar a la extrema derecha, dejando a salvo expresamente a la derecha de uno y otro país para integrarla a las coaliciones como ha hecho Lula y como ocurre con el superministerio de Massa o a las eventuales alternancias.

La intervención del activismo en un congreso abierto a los luchadores del FIT Unidad es de importancia estratégica. La provincia ha sido el escenario mayor de las grandes luchas piqueteras y por la tierra y la vivienda, el distrito de la gran huelga del Sutna, de grandes paros docentes desde la Multicolor, de las luchas del Hospital Posadas y la salud bonaerense, más recientemente de la huelga de Molinos Cañuelas y tantas luchas obreras parciales, como de movidas ambientales en diversos puntos.

A ese activismo nos dirigimos para poner en debate el perfil del Frente, contra todos los políticos capitalistas, delimitado agudamente del kirchnerismo y sus maniobras de contención, en la convocatoria al plenario en Lanús el 11. Para reforzar la campaña por un congreso del FIT Unidad que por su programa, por su gravitación en la lucha de clases y por el perfil de sus candidatos, proyecte a los trabajadores como alternativa política.

https://prensaobrera.com/partido-obrero/la-citacion-por-el-juicio-politico-a-la-corte-es-el-comienzo-de-una-farsa-sin-destino