Las primeras manifestaciones de la campaña electoral
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Se realizó el primer acto público de Pueblo Unido, enmarcado en la campaña electoral a la diputación nacional de Gumersindo Parajón. El Acto fue multitudinario, pues se reunieron 600 personas para escuchar los discursos y planteos de PU en esta ciudad del interior, de 15.000 habitantes.
Hablaron primero Godoy y Carbajal, el primero, trabajador municipal de la localidad y dirigente de ATE, y el segundo, actual desocupado y presidente de Centros vecinales. Denunciaron la expoliación salarial de los municipales, la miseria y el hambre en la población y la corrupción en el Municipio, con la complicidad de los concejales radicales, peronistas y bussistas. Carbajal, con larga militancia peronista en la zona, anunció su renuncia al PJ.
Habló también Carola Carrillo, delegada municipal de Capital y dirigente de PU. Denunció claramente el carácter traidor y corrompido de los aparatos políticos y la dirigencia gremial, que son inservibles para una lucha consecuente por los reclamos y aspiraciones de los trabajadores y del pueblo. Planteó que sólo con un curso de lucha, organización y conciencia se podrá arribar a una victoria popular y ofreció a PU como una herramienta para ello.
Parajón, con singular dureza, partió de denunciar la situación de los trabajadores, de los azucareros y los de Bella Vista en particular, a quienes se les quiere hacer pagar la crisis que han provocado las grandes empresas y bancos, con la complicidad de las políticas de los gobiernos nacional y provincial. Denunció la corrupción e inmoralidad de los políticos de los partidos mayoritarios. Denunció la flexibilización salarial, la desocupación masiva, la actitud colaboracionista de los dirigentes gremiales y de la FOTIA, que "concertan con Busssi en vez de confrontar" (sic); la destrucción deliberada de la salud y la educación públicas; la represión, la impunidad y la persecución policial a la juventud, etc.
Planteó que la lucha contra los cierres de ingenios y de las fuentes de trabajo es una lucha popular, pues "las fábricas y las riquezas son del pueblo" (sic); que hace falta sindicatos y "una FOTIA clasista y combativa" (sic) en clara referencia del PJ y la UCR (y también del Frepaso, como lo manifestó en reuniones previas).
En distintos momentos, la concurrencia aplaudió espontáneamente y fue visible la presencia de numerosos trabajadores del ingenio, la municipalidad, de sanidad y maestros.
Este acto, hecho en un lugar tradicionalmente peronista y refractario a otras corrientes, tiene un importante significado político. Demuestra que hay una enorme tensión social que se alimenta de la irresolución de las aspíiraciones mínimas de las masas.