Políticas

13/12/2000|692

Libertad a los presos políticos y gremiales

El FMI condiciona el “blindaje” a que De la Rúa vete la restitución del 12% de los salarios que el gobierno impuso en mayo pasado. De la Rúa prometió el veto.


Pero no sólo eso, porque además prepara un aumento de las tarifas del agua, la aplicación del ‘boletazo’ de los colectivos, el aumento de la edad de retiro jubilatorio para la mujer y la reducción los montos de las futuras jubilaciones, eliminando la Prestación Básica (PBU) a más de 10 millones de trabajadores en actividad.


La economía popular se ajusta, se reajusta y se re-reajusta cada vez que lo reclaman los capitalistas para zafar de las contradicciones cada vez más explosivas de este régimen de explotación social.


El año termina además con cierres y despidos masivos en la industria automotriz, en alimenticias (frigorifíco Cepa, cadena Wendys, Adams), etc.


Pero también con compañeros como Castells o Alí, encarcelados por el ‘delito’ de pedir pan para los jubilados y desocupados, y especialmente con los presos políticos de La Tablada, que se están muriendo ante la impasibilidad del pueblo argentino que no entiende este sacrificio y con la complicidad de radicales, peronistas, frepasistas y burocracias sindicales, que ofrendan la vida de estos compañeros a la necesidad de legitimar a las FF.AA. y a su represión a La Tablada, para poder usarlas en las próximas represiones contra los trabajadores y piqueteros.


Hay también miles de sindicalistas y piqueteros procesados penalmente por luchar.


Después del paro general del 23 y 24, corresponde seguir la lucha, con un paro general activo de 72 horas hasta derrotar los planes antiobreros y entreguistas, hasta imponer las reivindicaciones de las masas.


Que se prohiban los despidos. Que se repartan las horas de trabajo existentes entre todos los trabajadores ocupados y desocupados, sin disminución de salarios. Por un salario mínimo de 600 pesos por 8 horas de trabajo. Aumento general del 50%. Derogación de los aumentos tarifarios. Subsidio al desocupado de 500 pesos. Anulación de la reforma laboral antiobrera. No pago de la deuda externa. Expropiación de las AFJP, la banca y las empresas privatizadas. Control Obrero. Libertad a Castells, Alí y a los presos políticos de La Tablada. Cárcel a los represores y a los entregadores.


Fuera el gobierno fondomonetarista: por una Asamblea Constituyente soberana.


El pueblo trabajador debe organizarse y luchar por imponer esta perspectiva: Congreso Nacional de Bases del movimiento obrero y los desocupados.


¡FUERA EL GOBIERNO DE LA ALIANZA Y LOS GOBERNADORES DEL FMI!


POR UNA ASAMBLEA CONSTITUYENTE LIBRE Y SOBERANA