Políticas

22/4/1999|623

Liquidan la Prestación Básica para los jubilados

En 1994, cuando se aprobó la jubilación privada, el Partido Obrero señaló que el paso siguiente era la eliminación de la jubilación mínima, llamada Prestación Básica Universal (PBU), que hoy es de 200 pesos, algo que el gobierno anunció la semana pasada y que figura en el reciente acuerdo con el FMI.


En el folleto Jubilación Privada. La Bolsa o la Vida, el PO planteó que la inclusión en la privatización previsional de una garantía de jubilación mínima o PBU, a cargo del Estado, era tan sólo “un anzuelo” para presentar a esa reforma como beneficiosa para los nuevos jubilados y que el Estado capitalista bajo ninguna circunstancia pensaba pagar esa jubilación mínima. El tiempo nos ha vuelto a dar la razón.


“¿Por qué el ministro Cavallo promete un lecho de rosas para los futuros jubilados?”, preguntábamos en La Bolsa o la Vida. Y la respuesta fue: “Porque quiere que el Parlamento le apruebe la ley como sea … sencillamente porque no piensa cumplir lo que establece su propio proyecto de ley”.


¿Por qué anticipamos que el gobierno eliminaría la PBU? Porque la jubilación privada implica el hundimiento de la jubilación estatal y de toda garantía de jubilación mínima. Como el aporte que antes iba a las Cajas estatales pasó a manos de las AFJP y el aporte patronal que también iba a las Cajas estatales fue reduciéndose año tras año, el régimen previsional público se fue quedando sencillamente sin dinero.


Por eso, en La Bolsa o la Vida dijimos: “¿Cómo harán las Cajas oficiales, que no están abonando el 82% a los actuales jubilados, para pagar en el futuro un porcentaje similar a los nuevos contingentes de trabajadores que se jubilen, si al mismo tiempo se les restan a las Cajas esos 8.000 millones de dólares?” (de los aportes desviados a las AFJP y por la reducción de los aportes patronales). El ministro Cavallo no se ha tomado ni siquiera el trabajo de explicarlo, sencillamente porque no piensa cumplir lo que establece su propio proyecto”.


Ahora Roque Fernández completa la “estafa” (así la calificábamos) de Cavallo planteando que el Congreso legalice la eliminación de la PBU para un sector de los futuros jubilados y aumente la edad de jubilación de las mujeres de 60 a 62 años.


Para hacer pasar eso, como en su momento hizo Cavallo, promete una nueva “estafa”. Dice que con esas medidas y, si además el Congreso vota una ley llamada de “convertibilidad fiscal” y una nueva “coparticipación federal” —o sea que las provincias reciban menos dinero de la Nación, forzándolas a poner nuevos impuestos— se podría aumentar la jubilación mínima de 150 a 190 pesos por mes a los actuales jubilados.


Los jubilados son así rehenes para cometer una nueva y más grande estafa contra los jubilados, los consumidores, las Provincias y los trabajadores. Todo esto ‘bendecido’ por el FMI.


Además de ridículo, el supuesto aumento de la jubilación mínima es otra estafa. Porque Roque Fernández dijo que ese aumento lo recibirían 400.000 jubilados, cuando hay 1.200.000 jubilados que ganan menos de 190 pesos por mes. Lo que sucede es que hay cerca de 800.000 jubilados que cobran un subsidio a la pobreza de unos 50 pesos, que quedarían eliminados si la jubilación mínima pasa de 150 a 190 pesos.


Por todo eso es que el PO plantea:


* Jubilación mínima de 500 pesos. El propio gobierno, a través de la Secretaría de la Tercera Edad, reconoció que la canasta mínima de subsistencia de un matrimonio mayor es de 580 pesos.


* Anulación de la reducción de los aportes patronales.


* Anulación de la jubilación privada.