El cierre del acto de campaña del Frente de Izquierda-Unidad estuvo a cargo de Nicolás Del Caño, candidato a presidente.

Del Caño señaló que “estuvimos recorriendo el país de norte a sur, de este a oeste” y saludó la gran campaña de la militancia contra la polarización entre las candidaturas patronales de Macri y el Fernández-Fernández, destacando que “logramos instalar al FIT-U como una alternativa para miles de jóvenes, de trabajadores y de mujeres que han salido a luchar en la Argentina”.

El referente del PTS señaló que “el gobierno de Macri profundizó todos los problemas estructurales: millones de nuevos pobres, cientos de miles que perdieron fuentes de trabajo; se han pulverizado los salarios y las jubilaciones y aplicado brutales tarifazos en beneficio a las petroleras”. Y enfatizó en el efecto particular de esta situación en las y los jóvenes, muchos de los cuales “hoy están viendo al Frente de Izquierda-Unidad como una alternativa” frente a quienes gobiernan para las patronales precarizadoras.

El discurso del candidato marcó una confluencia de los partidos tradicionales en un plan de precarización laboral, señalando que mientras Macri, Lavagna y Espert promueven una reforma laboral negrera, Alberto Fernández plantea junto a la burocracia sindical “discutir convenio por convenio”, con “el modelo de Vaca Muerta, donde se firmó un convenio de flexibilización que trajo la muerte de muchos compañeros”. Y destacó que “somos la única fuerza que plantea con claridad ‘basta de flexibilización’ y echar a la burocracia sindical para luchar por los derechos de la clase trabajadora”.

En referencia al pacto con el FMI y la deuda externa, Del Caño señaló que “de ninguna manera vamos a aceptar pagar la deuda con el hambre de nuestros niñas y niños, jubilados, trabajadores. Planteamos el no pago de la deuda y que la crisis la paguen los que la generaron”.

En sus conclusiones, vaticinó que “cientos de miles de trabajadores y trabajadoras van a acompañar al Frente de Izquierda-Unidad” este domingo, llamó a redoblar el esfuerzo  para conseguir miles y miles de fiscales y señaló que “nuestra perspectiva es reorganizar el país sobre nuevas bases: que todos los recursos, toda la riqueza no esté en manos de un pequeño puñado de terratenientes, de banqueros, de especuladores, sino que esté en función de las necesidades de las grandes mayorías populares, con un gobierno de trabajadoras y trabajadores”.