Políticas

15/5/2021

Neuquén

Los anuncios de Gutiérrez: un cero a la izquierda

Un gobierno en “stand by” ante la catástrofe sanitaria en curso

El gobernador de la provincia del Neuquén, Omar Gutierrez, luego de no emitir palabra durante las semanas de la huelga de Salud y las manifestaciones populares de apoyo a los huelguistas, convocó hoy a una conferencia de prensa.

El anuncio de la misma generó grandes expectativas, ante el curso de la pandemia y las explosión de contagios, la circulación de las cepas más virulentas y letales y el colapso de las camas UTI.

Alimentando esa expectativa desde el gobierno se realizaron durante todo el día reuniones febriles con intendentes, ministerios, sindicatos y cámaras empresarias. Un procedimiento que expresa el grado de conmoción que se vive en la población.

Sin embargo los anuncios oficiales en la conferencia de prensa por la tarde, no implican la adopción de medidas acordes con la gravedad cuasi terminal, que hasta el propio gobierno reconoce.

Se mantiene activa toda la actividad económica, e incluso en algunas actividades como la hidrocarburífera, se ha adoptado una medida contraria a los intereses de sus obreros, como es alargar los períodos de rotación en los yacimientos, un punto que ahorra costos a las empresas y atenta contra el reclamo de sus trabajadores para pasar a regímenes laborales con menos días activos y más días de descanso.

Los locales comerciales y la gastronomía prácticamente no sufren ninguna restricción. Lo mismo la actividad en iglesias y templos. Esto se completa con medidas de corte punitivo solamente (aumento de las multas) y de regimentación social al prohibir la circulación entre las 22 horas y las 06 de la mañana, y la presencia de grupos mayores a cinco personas en la vía pública.

Un capítulo especial lo merece los anuncios sobre educación. En un marco donde los contagios docentes crecen sin cesar y las burbujas aisladas también, se suspendió la presencialidad solo por una semana, pero manteniendo las escuelas abiertas con “guardias” de docentes y auxiliares, lo que generará todo tipo de aprietes de parte de los funcionarios para violar la suspensión.

Exceptuó de dicha suspensión a la Educación Especial, donde tal vez se concentre el estudiantado con mayor nivel de vulnerabilidad y comorbilidades.

Todo indica que la suspensión por solo una semana (del 17 al 21) apunta a sostener con un asueto el lunes 24, el fin de semana turístico largo, para garantizar el negocio de las patronales del sector. Una medida siniestra teniendo en cuenta que la zona sur de la provincia registra los peores índices de la pandemia y saturación de sus hospitales.

Atado a la defensa de la renta empresaria, teme la rebelión popular

Los anuncios y el estilo de la exposición, mostró lo que gran parte de la población ya caracteriza como una “borrada” del gobernador en medio de la crisis social y epidemiológica.

Los argumentos oficiales en la conferencia de prensa fueron de una endeblez mayúscula. Por ejemplo el gobernador afirmó que lo ocurrido en los dos o tres últimos días “no lo esperaba nadie, nos sorprendió a todos”. Cuando las alarmas hace semanas que están sonando y las y los trabajadores de la Salud lo han advertido desde antes y durante todas las semanas de su huelga.

Una de las razones de lo que los medios catalogan como “parálisis” gubernamental, la esbozó el propio gobernador cuando recogió el guante de la grieta interna en el MPN (anterior a la huelga de Salud, pero que ésta expuso en carne viva), y adjudicó la rebelión de Salud a “errores propios” que lo dejaron en soledad ante la misma. Una falta de respuesta que duró semanas, no días y que terminó doblándole el brazo.

Su fingida “autocrítica” no puede esconder que su gobierno impulsa no solo sumarios o causas por los piquetes, sino que está abriendo causas motivo de exoneración por haber participado de la huelga, en un ataque a fondo que busca escarmentar de cara a los nuevos ajustes que debe aplicar.

No está claro aún, por ejemplo, como obtendrá los fondos para pagar los salarios acordados y si va a respetar esos acuerdos.

La reivindicación de sostener la presencialidad, solo con una breve suspensión, es otro aspecto que debe afrontar con una porción menor de las y los trabajadores de la educación vacunados en un contexto de extensión de la pandemia con la cepa Manaos y Reino Unido.

Pero también enfrenta el descontento de sectores de los pequeños comerciantes, que ya no le toleran ni el achique de una hora en el horario de atención habilitado.

Al gobierno lo aterra el marco más general que debe enfrentar: el conflicto de Salud no se ha cerrado, y cuenta con el apoyo popular masivo a sus trabajadoras/es; con el personal en las escuelas que reclaman suspender la presencialidad por un tiempo más prolongado y en todas las modalidades, y ante un invierno sin aumentar la ayuda social (por el contrario la pretende reducir en consonancia con el gobierno nacional.

Las atadura al mediano y gran capital y la garantización de su renta, va a contramano de lo que exige la situación como una planteo de salida progresiva. El gobierno ha atado su suerte a la defensa del capital, y no tiene un capital político para enfrentar una rebelión más general. Un estado de ánimo popular y masivo, que hoy se expresó con toda claridad en los abrumadores mensajes de apoyo a Salud en el marco de la difusión de la conferencia de prensa.
Para colmo hoy, el sector Covid-19 del hospital Castro Rendón, el de mayo complejidad de la provincia, se inundó por roturas de sus cañerías. Como una muestra del estado calamitoso de toda la infraestructura hospitalaria y la falta de previsiones ante una ola recontra-anunciada hace meses.

El pez por la boca muere

Aunque repitió el latiguillo de la “institucionalidad” y la “democracia”, no se privó de comparar la huelga de Salud y los piquetes con un intento “desestabilizador” o de “escalada de violencia” comparándolo con los actos que nos llevaron a “momentos oscuros” en nuestra historia.

Un mensaje nefasto y peligroso en boca de un gobernador. Porque está claro que el mismo constituye una amenaza contra los reclamos populares y las acciones como la huelga y movilizaciones.

En síntesis: para los preparativos que impulsó, los anuncios no resuelven ni mínimamente la situación de gravedad pandémica que se vive, pero no se privó de amenazar a los que pretendan dar una salida progresiva contra la orientación social capitalista de su gobierno.

El Partido Obrero, en la medida de las posibilidades y con los resguardos del caso, impulsará la campaña por las 10 medidas básicas para dar una salida desde y a favor de la clase obrera a la presente situación.