Políticas

16/6/2011|1181

Elecciones municipales en Villa Allende: Los candidatos de Edesur, Carrefour y Grunhaut construcciones

El 26 de junio, los vecinos de Villa Allende, uno de los municipios más grandes del Gran Córdoba, votarán para elegir intendente, concejales y tribunal de cuentas.

Durante el último tiempo, los vecinos han visto cómo las condiciones de vida se degradan cada vez más aceleradamente, como resultado de la especulación inmobiliaria. Al descomunal aumento de los alquileres y el precio de los terrenos, se suma el colapso de los servicios públicos (la falta de cloacas ya se huele en el aire de la villa, al igual que la red eléctrica). Todo esto acompañado de un sistemático incremento de las tasas municipales.

Mientras tanto, las grandes construcciones como shopping, countries, mega-mercados y cadenas de cines proliferan en un reducido sector de la ciudad.

La actual gestión municipal postula a Martín Ambort, actual presidente del Concejo Deliberante, quien en su prontuario cuenta con 43 mil pesos de deuda con el municipio y una innegable ligazón con un reguero de hechos delictivos. Unión por Córdoba lleva a Colombo, ex juez de paz del pueblo, un desconocido en la política local que intenta hacer pasable la lista del PJ, copada por los punteros de De la Sota, del pejotismo local. El juecismo se “abstiene”, no presenta candidato, en un pacto tácito con los punteros radicales.

El Partido Obrero-Frente de Izquierda se presenta a estas elecciones con un programa que pueda ponerle punto final al deterioro de la villa. Lleva a Marcelo Chico, destacado luchador local, como candidato a intendente, y Estela Méndez, dirigente de la oposición clasista del gremio docente, como candidata a presidente del Concejo Deliberante.

Planteamos un programa para que la ciudad sea gobernada en función de las necesidades populares y no de un puñado de capitalistas:

1) convocatoria a una asamblea de delegados, mandatados por los vecinos de los distintos barrios, para acordar una planificación del desarrollo urbano en función de los intereses de la mayoría, contemplando los problemas de viviendas, cloacas, transporte y obras públicas;

2) aumento del presupuesto de salud; ampliación del centro de salud a más especialidades;

3) reducción de las tasas municipales que pesan sobre las viviendas únicas;

4) basta de abuso policial; plena vigencia de las libertades democráticas; abajo el código de faltas;

5) aumento del presupuesto de cultura en función de los planes que se resuelvan democráticamente en la Casa de la Cultura; no a la persecución de las iniciativas artísticas y culturales.