Políticas

21/1/2023

BUENOS AIRES

Los capitalistas son los responsables de la sequía

Kicillof, la emergencia y la Mesa de Enlace.

Kicillof, con Intendentes y empresarios rurales

“Estoy para otro mandato”, declaró el gobernador Axel Kicillof en Pinamar, ratificando sus pretensiones reeleccionistas. El lugar elegido, un municipio de la costa atlántica dirigido por el PRO, fue utilizado por el gobernador como tribuna para congraciarse con los reclamos capitalistas del “campo”.

En el “encuentro con las fuerzas de la producción” -como llamó el gobernador a su acto de campaña-  un dirigente de Coninagro pidió la continuidad de las “políticas activas”, en una clara referencia  a la reelección de Kicillof. La mojada de oreja al intendente amarillo de Pinamar no le salió gratis al gobierno provincial del Frente de Todos: Kicillof y su ministro de Producción Augusto Costa presentaron en Pinamar la segunda etapa de un programa por 400 millones de pesos para estimular el “cooperativismo agrario”.

Hablar de cooperativismo, tratándose de  Coninagro, es una lavada de cara a una organización patronal y a toda la Mesa de Enlace, responsable del acaparamiento especulativo de granos y soja, de las presiones devaluatorias contra el peso, y del aumento de los precios de la canasta alimentaria.

El  autor de los elogios y dirigente de la Unión Cívica Radical, Mario Raiteri, destacó el trabajo conjunto que vienen llevando adelante Coninagro y Kicillof en torno a la agenda de las economías regionales,  confirmando que el  “consenso” con las patronales del campo tiene  un alcance estratégico. Raiteri franelea a varias bandas y en  su calidad de convencional  de la UCR participó también del acto de lanzamiento de su correligionario Maximiliano Abad, precandidato a la gobernación bonaerense.

Kicillof aprovecha la dispersión de candidatos de la derecha para intentar picar en punta, expandiendo el gasto en favor de los capitalistas, en pleno ajuste contra los trabajadores. Sin embargo, no las tiene todas consigo, como lo prueba la postergación de la reunión de la Liga de Intendentes y la nueva fecha puesta al cónclave del PJ bonaerense que pasó para febrero, a la espera de que las candidaturas del Frente de Todos se desensillen hasta que aclaren.

Detrás de la “Liga” está Martín Insaurralde, quien busca disputarle la precandidatura de “unidad” a Kicillof. A su vez, Máximo Kirchner buscará con la reunión del PJ bonaerense retomar una iniciativa que perdió con la renuncia de Cristina a ser candidata. Más allá de las roscas por la lapicera electoral, la crisis del peronismo es justamente la de un gobierno nacional y provincial que tiene al 50% de la población sumida en la pobreza. El límite de las maniobras de Kicillof es el ajuste.

Todos ponen

Como respuesta al gobernador, el candidato del PRO, Diego Santilli, hace campaña atacándolo  por haberse borrado en la “mala” y en  plena sequía. Santilli recorre el interior de la provincia de Buenos Aires denunciando la “indiferencia” del peronismo gobernante frente a una seca que abarca a 67 municipios y que está provocando pérdidas por millones de dólares.

Las entidades patronales que conforman la Mesa de Enlace, y en particular los pools sojeros, gravitan decididamente en la contienda electoral del oficialismo y la oposición. Exigen que se aplique la “emergencia” para combatir la sequía, o sea  que el Estado les garantice subsidios a manos llenas, créditos blandos y la eliminación de impuestos. A la Sociedad Rural, Carbap y Coninagro les cabe aquello de  que “el liberalismo es el otro”;  mientras claman por un Estado presente para la Mesa de Enlace, piden mano dura contra los planes sociales y reforma laboral para terminar con los “impuestos distorsivos al trabajo”, como llaman los explotadores a los  aportes patronales.

Al pedido de auxilio se suman los liberfachos de Milei y Espert, este último  con el aval de la Sociedad Rural de la provincia de Buenos Aires, que firmó un documento de apoyo a su candidatura a gobernador. La doble vara capitalista   comprende a  los “libertarios”, a todas las fracciones de Juntos, y por supuesto, al gobierno del Frente de Todos que suprimió 150.000 planes sociales para cumplir con las metas de reducción del déficit fiscal que pactaron Massa y el  Fondo Monetario.

Pese a las flores de Coninagro, las entidades agrarias de la Mesa de Enlace  vienen cargadas de exigencias. Las 114 asociaciones rurales que conforman la Carbap exigen   “medidas concretas”, pero una política de subsidios generalizados choca con las metas fiscales impuestas por el FMI para pagar la deuda externa.

Premio a la devastación capitalista

El  Banco Provincia otorgó más de 2.100 millones de pesos en créditos con tasas especiales a medio millar de “productores agropecuarios” que se declararon afectados por la seca. El próximo paso será atender los pedidos de cancelación (sin pago) de los créditos blandos otorgados para las explotaciones de hasta 500 hectáreas en el marco de la emergencia agropecuaria dictada en noviembre del 2022 en la provincia de Buenos Aires.

El impacto de la sequía es una consecuencia del cambio climático provocado por la depredación capitalista. La “cruel sequía” viene de la mano de la destrucción de los humedales y de la extension de la frontera de la soja. La emergencia que reclama la Mesa de Enlace es un rosario de demandas capitalistas que pagarán los trabajadores con el encarecimiento de los precios de los alimentos y  peores salarios e ingresos para “compensar” el costo fiscal.

Los graves daños económicos que provocan las sequías cada vez más prolongadas son el retrato de un régimen semicolonial que depende de las exportaciones agrarias y agroindustriales, y las desperdicia para  pagarle al FMI y al capital financiero. Una producción agraria al servicio del desarrollo nacional exige terminar con la renta extraordinaria del capital agrario, el saqueo ambiental y la sangría de la deuda externa.

El Partido Obrero se moviliza por la aprobación inmediata de la Ley de Humedales y denuncia la responsabilidad capitalista en la sequía que golpea a las poblaciones rurales y a más de medio centenar de distritos bonaerenses. Un programa de salida a esta crisis recurrente exige la nacionalización del
Comercio exterior en el marco de una planificación racional y sustentable del suelo, la apertura de los libros e investigación de los créditos blandos que van a los capitalistas y el no pago de la deuda externa.