Políticas

7/1/2021

Estatales

Los empleados del Inadi que encabeza Victoria Donda, también expuestos a la arbitrariedad

La precarización laboral es un método sistemático del Frente de Todos

La demanda presentada por la trabajadora de limpieza empleada por la directora del Inadi Victoria Donda en su domicilio no solo ha mostrado su conducta patronal y explotadora a nivel personal.

La propuesta de blanquear la relación mediante una contratación en el instituto que preside muestra la arbitrariedad con la que se manejan los ingresos laborales en el Estado, donde el acomodo pasa por encima de derechos adquiridos o idoneidad. Esta arbitrariedad es la base de relaciones prebendarias que se transforman en peajes y favores de todo tipo para ingresar a trabajar.

El conjunto de los trabajadores del instituto dirigido por Donda está en una situación de precariedad comparable a la de la empleada de limpieza que la ha llevado a la justicia laboral.

Los 400 empleados siguen en planta precaria, desde su fundación, hace ya 25 años. Sus contratos laborales deben ser renovados cada dieciocho meses. 115 concursos laborales realizados que debían dar lugar al ingreso a planta permanente de parte de los empleados que vienen desempeñándose bajo los sucesivos gobiernos fueron frenados por una impugnación de la administración de Donda y Alberto Fernández (Infobae, 7/1).

Alberto Fernández defendió la actitud de Donda, explicando que como esa persona no podía seguir trabajando en su domicilio, le ofrecía otro trabajo vía el Inadi (Infobae, 6/1). La naturalización del uso de contrataciones en el Estado como si fuera una propiedad personal delata la gran comodidad que tienen el presidente Fernández con la política del acomodo, el punterismo y la precarización laboral.

La conducta de Donda en su esfera privada no ha sido un derrape personal. Es la política de precarización laboral que lleva adelante su gobierno como forma de devaluar el costo laboral y dejarlos sin estabilidad y condiciones laborales.

Junto al blanqueo y el salario igual a la canasta familiar que reclaman las trabajadoras de casas particulares reclamamos el pase a planta permanente de los miles de precarizados que se desempeñan en el Estado y el manejo de nuevos ingresos mediante una bolsa de trabajo controlada por la asamblea de empleados.