La Cámara de Diputados, con el voto del PJ, aprobó el proyecto presentado por Romero para convocar a un referéndum en el departamento Rivadavia. El proyecto establece que dicha consulta es para decidir la entrega de los lotes fiscales 55 y 14 a sus habitantes. No se decide sobre cómo va a ser la distribución de esos lotes, ni si existe algún criterio para ello.

El Partido Obrero denunció que la medida esconde la intención de entregar estos lotes fiscales y los recursos naturales que en ellos se encuentran, a manos de grandes empresarios. “Tengamos en cuenta el antecedente del remate de los lotes 32 y 33, la privatización de Salta Forestal, la expulsión de los campesinos de Finca Las Costas, donde el gobernador tiene su lujosa residencia. Esta es la política que quiere refrendar el gobierno el mismo día de las elecciones generales de octubre (para evitar el debate específico por el problema de las tierras), limitándolo a un departamento para que la discusión no sea provincial”, explicó el diputado Pablo López.

El oficialismo dice que la solución de la tenencia de los lotes fiscales es una condición para hacer las obras que necesita esa población. Pero la titularidad de la tierra no es un impedimento para realizar obras. En diez años de gobierno no se ha modificado la indigencia histórica y el sometimiento de aborígenes y criollos que viven en la región. El diputado Del Plá denunció “los informes del gobierno que señalan que los 34 millones que promete para obras, que incluso no son prioritarias, no los tiene y que hay que salir a buscarlos, pero que sí tiene los fondos para construir en la ciudad de Salta un centro de convenciones que costará 25 millones de pesos”.

La medida aprobada admite la opción por el No, en cuyo caso la expulsión de los poseedores sería inmediata, desconociendo que las comunidades aborígenes tienen derechos adquiridos sobre las tierras .

El Partido Obrero rechazó el proyecto, denunciando la entrega de la tierra y los recursos naturales al gran capital, y exigió que se declare la inembargabilidad de las tierras de los lotes 55 y 14, la imposibilidad de su transferencia, y que la forma de explotación de las mismas surja del debate colectivo de sus habitantes y vaya acompañada de créditos e inversiones estatales bajo el control de las comunidades, que hagan viables sus economías.