El año pasado, en un cuadro de huelgas y movilizaciones, la Legislatura votó la ley de pase a planta de los trabajadores precarizados del Estado provincial. Pero su reglamentación demoraba indefinidamente. Sólo se incorporaba a los contratados de obra y de servicio, dejando afuera a miles de becados y otros programas, que trabajan así hace casi una década. Tribuna Estatal distribuyó el borrador del proyecto en todas las dependencias, lo que puso en marcha un movimiento de lucha: así se desarrollaron asambleas, paros e importantes movilizaciones, incluso un piquete de medio centenar de trabajadores de la Casa de Gobierno tomó las escaleras interiores y fue desalojado por la policía provincial bajo la orden directa del vicegobernador Ivanov Vacilief.

El 24 de junio, seiscientos precarizados estatales, bajo la lluvia, encolumnados bajo las banderas de Tribuna Estatal, se movilizaron hasta conquistar la incorporación en la reglamentación del pase a planta a los becados y PEL (Programa de Entrenamiento Laboral). El gobernador y su gabinete firmaron el decreto. Una victoria popular. Se conquistó, a su vez, el reconocimiento de los años trabajados en forma precaria para computar la edad jubilatoria.

La demora de la reglamentación era fogoneada por el sindicato estatal UPCP, para dejar afuera de las elecciones de diciembre a los nuevos estatales (se necesitan seis meses para poder votar). Se trata de una dirección asimilada a Capitanich: su secretaria general, Betty Bogado, pidió licencia para asumir como ministra de Desarrollo Social, y su marido, Niz, asumió en su lugar.

A esa burocracia sindical le dimos la más dura batalla. Hoy, Tribuna Estatal de Chaco emerge como la garante de los precarizados y del orden de prioridades en el pase a planta, de modo que ningún pariente de la burocracia entre por la ventana, como ocurrió en Salud pública. Impulsamos al mismo tiempo, una lista antiburocrática para recuperar UPCP.