Políticas

18/5/2006|946

Luchar o luchar


La situación política de Catamarca y el país no es tan compleja como nos quieren hacer creer. En Catamarca, los políticos ‘capitalistas’ como Brizuela del Moral (máximo defensor de la contaminación); el ex gobernador Saadi (expulsado del gobierno por corrupción); Barrionuevo (que se adjudicó ser un recontra alcahuete de Menem); los Castillo (hoy tapa de los diarios por estafas al Estado), “todos” se unieron en las filas kirchneristas, y las peleas que vemos a diario en los medios, es por ver quién es el que va a dirigir este “titanic” de papel. “Todos estos” se quieren sentar en las rodillas de Kirchner para seguir en el poder, aunque más no sea en condición de chirolitas, ¡pero seguir! Kirchner se denomina anti-dictadura militar, pero tiene a un ex funcionario de la dictadura (Pastoriza) como candidato en nuestra provincia. ¿Podemos crecer como país militarizando los lugares de trabajo en defensa de los pulpos que financian guerras en el mundo?


 


Los capitalistas no se cansan de festejar por la plata que ganan. Los recursos naturales como “el agua, la luz, la minería y el combustible” fueron siempre explotados y controlados por inversionistas y políticos codiciosos (o sea, por capitalistas) que usan nuestras riquezas para su beneficio, y que sólo nos dejan contaminación, depredación y desocupación. Decimos que los recursos naturales no pueden estar en otras manos que no sean la de los trabajadores y asambleas vecinales. Es la única forma de que las riquezas sean para beneficio del pueblo, con más ocupación y sin contaminación. De lo contrario, o sea como hasta ahora, vamos a seguir con aguas con nitratos (caca); explotación minera altamente tóxica y causando daños irreversibles; seguiremos con el viejo y conocido generador de cáncer, como lo son los transformadores con PCBs que reina en nuestras veredas; o seguiremos bajo los bosques de antenas de telefonía celular que provocan incremento del estrés, depresiones, angustias, insomnio, palpitaciones, cáncer, leucemia, tendencias suicidas, etc. Llamamos a organizarnos en los barrios, en contra de la contaminación y para exigir obras a cargo de los vecinos desocupados, iluminación de las calles, asfalto, desinfectación, y sobre todo “echar de los barrios a la policía” que persigue a los vecinos que se organizan para luchar por una vida digna. Llamamos también a los trabajadores a romper con los “gordos de los techos salariales” y luchar por un salario igual a la canasta familiar (2.000 pesos), porque sobra plata y porque hay minería de sobra.