Las mesas del bar de la calle Cafayate al 5200 tuvieron que juntarse para poder armar la reunión. Jóvenes del barrio, maestras, jubilados y hasta comerciantes de la zona se acercaron a la charla convocada para impulsar la campaña del Frente de Izquierda en la Ciudad, con la presencia de Marcelo Ramal y de Valeria Filgueira, delegada docente y primera candidata de la Comuna 8 por el Frente de Izquierda. “Macri abandonó las torres de Lugano a su suerte, lo mismo que hicieron Ibarra y los demás”. Una vecina nos relataba, de ese modo, el cuadro de situación de este barrio de gigantescos monoblocks. El Instituto de Vivienda de la Ciudad se desentiende de las tareas esenciales de mantenimiento -y hasta de reconstrucción parcial- planteadas en estos edificios, cuyas instalaciones eléctricas, de gas y de agua se encuentran en estado de colapso. El instituto macrista presiona a los vecinos a completar los trámites de escrituración. “Pero nos damos cuenta de la maniobra: quieren desentenderse de todo, de las fallas constructivas, de todo el deterioro pasado, para que nos hagamos cargo nosotros”. Los jóvenes presentes -incluso vinieron con sus guitarras- nos relataron la ausencia de cualquier estructura para el esparcimiento o el desarrollo artístico. El secundario artístico Lola Mora, que debería cumplir con ese papel, ni siquiera titulariza a sus docentes.

La reunión convocada por el Partido Obrero en Lugano contó con la presencia del doctor Ricardo Zambrano, impulsor de la lucha por el hospital zonal, así como de la compañera Rosa, del barrio Samoré y de la multisectorial de la zona oeste. Zambrano denunció la negativa del macrismo por hacer del hospital de Lugano -arrancado mediante una larga lucha- un verdadero hospital polivalente y, en cambio, querer reducirlo al papel de una sala de atención primaria. Por su parte, Rosa denunció el carácter contaminante del futuro Polo Farmacéutico que se instalará junto al parque Indoamericano, en tierras cedidas por la Corporación del Sur. Ramal señaló que la Corporación constituía un bloqueo fundamental para avanzar en una urbanización de carácter social en el sur de la Ciudad. En el caso del Polo Farmaceútico, se trata de una operación de evasión institucionalizada en favor de algunos grupos empresarios, que trasladarán sus laboratorios desde otros puntos de la Ciudad para instalarse en Soldati con un régimen preferencial de impuestos. Frente al futuro “polo” empresario está la Villa 20, con una ley de urbanización votada -e incumplida- hace tres años. En oposición a estos negociados, presentamos un programa para colocar la Corporación y todos sus recursos bajo el control de las organizaciones obreras y vecinales de la zona. El Frente de Izquierda luchará para hacer de la Legislatura una tribuna de planteos transformadores y no de seguidismo rutinario al régimen social imperante en la Ciudad.

Los presentes, pero sobre todo los jóvenes, vivieron la reunión como un punto de partida. Todos acordaron en que tenían vecinos y amigos para acercar a la campaña del Frente. Preparamos una nueva convocatoria general en dos semanas.