Políticas

12/4/2017

Mar del Plata: Las causas no naturales de una ciudad inundada


La insistencia del intendente Carlos Arroyo y sus colaboradores en el "carácter extraordinario" de las lluvias caídas en Mar del Plata, busca ocultar la responsabilidad política de los gobiernos de Cambiemos en los efectos devastadores del temporal. La inundación de varios barrios se produce en una ciudad que vive una crisis de infraestructura y servicios, como producto del ajuste, y en la que prima el beneficio a los capitalistas en desmedro de la población.


 


Los programas de obras públicas de infraestructura brillan por su ausencia, como producto del desfinanciamiento por parte de los gobiernos nacional, provincial y municipal –el ítem “Infraestructura Básica y Desarrollo comunitario” representa el 0,3% del presupuesto de la ciudad–, y son sujetos a los negociados de turno de los Báez y Calcaterras locales.


 


Pese a las grandes erogaciones a la empresa de recolección 9 de Julio, ésta presta un servicio enormemente deficitario; en este cuadro, el amontonamiento de basura en las calles y veredas de Mar del Plata, contribuye al colapso de los desagües pluviales.


 


A su turno, la limpieza de pluviales y arroyos ha sido una víctima del ajuste de Arroyo: trabajadores de las cooperativas, que en los últimos años desarrollaban esta tarea en condiciones de ultraprecarización y a quienes correspondería su pase a planta, fueron en cambio despedidos.


 


Los problemas más graves se concentran en barrios donde no es necesario mucha agua para que miles a de marplatenses se les aneguen las calles y casas: con un déficit de casi 20.000 viviendas, con decenas de barrios precarios sin urbanizar, los damnificados se multiplican año a año. En este cuadro, los respectivos gobiernos ejecutan una vieja “gimnasia”: la evacuación de cientos de afectados a lugares provisorios, a quienes se otorgan apenas colchones, una alimentación mínima y las donaciones de la ciudadanía, y que deben volver a esperar en una casilla –si quedó en pie– la próxima inundación.


 


Entre las causales del colapso se encuentra la creciente privatización de los espacios públicos, una política de Estado tanto para Gustavo Pulti (ex intendente de Acción Marplatense-Frente Para la Victoria) como para Arroyo. Varias obras públicas están demoradas porque su concreción “afecta” el usufructo privado de las playas, como es el caso de las obras de desagüe del Arroyo del Barco, o el relleno de la Reserva Natural del Puerto.


 


Desde el Partido Obrero planteamos


 


Inmediata atención del gobierno municipal a los damnificados.


Plan de viviendas populares y de urbanización de barrios.


Plan de obras de infraestructura (hidráulicos, hospital, escuelas) bajo control obrero.


Reincorporación de todos los despedidos. Pase a planta. Refuerzo de las cuadrillas de mantenimiento y reparaciones.


Recuperación de todos los espacios públicos cedidos o usurpados por los privados.


Puesta a disposición estatal de todas las tierras urbanas destinadas a la especulación inmobiliaria.


Estatización del servicio de recolección y limpieza bajo control de los trabajadores, manteniendo convenios y salarios.


Para llevar adelante este programa, los fondos deben salir de una tasa extraordinaria a los grandes propietarios y especuladores del suelo y el espacio urbano.