El día 19/4, cuando se cumplía una nueva jornada de lucha de la ANT, en la Asamblea de Corralitos se dio un debate muy interesante, a raíz de que el 15 falló el micro que debía movilizar al barrio a la marcha de la Coordinadora provincial, que se formó después de la represión del 4 de abril. Algunas compañeras se sintieron derrotadas por el problema del 15 y se negaban a la movilización, y otras proponían seguir la lucha más allá de las dificultades. La discusión fue muy importante, hasta que se impuso la segunda posición y terminamos llevando una importante delegación al escrache que hicimos frente a Edemsa, la empresa de electricidad que ya arregló con el gobernador Cobos un tarifazo. Movilizar ese día al barrio fue un triunfo político, porque dejamos en claro, ante todos los vecinos de la barriada, que el Polo Obrero es una organización que no se deja vencer.

 

Lo importante es que en la asamblea posterior se notó un salto político en algunas intervenciones; la compañera Marisa, que el 19 no se movilizó, propuso para terminar con la inseguridad que los vecinos se unan y saquen a palos a los chorros sin esperar a la Policía, que nunca hace nada; empezamos a preparar un petitorio con los problemas urgentes de los barrios, y hubo un acuerdo para salir con todo para la próxima jornada nacional de lucha. Es que en una barriada con casas sin escriturar, sin iluminación, con un transporte en pésimo estado y que es el más caro de la provincia, con un 80% de trabajadores en negro, donde reina la impunidad, sin gas natural, etc., la lucha no puede detenerse.

 

Nos vemos en la lucha, y hasta la victoria.